Un trámite cuarto-chipriótico

El Real Madrid lo tiene todo a favor para certificar esta noche su pase a las semifinales de la Champions. A pesar del 0-3 de la ida, Mourinho sacará un once muy competitivo.





Si uno abre el diccionario de la RAE (Real Academia Española de la Lengua) se encontrará la siguiente definición de la palabra trámite: “Cada uno de los estados y diligencias que hay que recorrer en un negocio hasta su conclusión”. Traduciéndolo al ámbito futbolísticos diríamos que eso es exactamente lo que tienen ante sí Mourinho y sus chicos esta noche frente al Apoel, los 90 minutos de rigor del partido de vuelta de cuartos de final que debe llevarles como conclusión a enfrentarse al Bayern de Múnich en las semifinales de la Liga de Campeones.  Ni más ni menos.

Alineaciones probables:

Real Madrid: Casillas; Altintop, Sergio Ramos, Pepe, Coentrao; Xabi Alonso, Sahin o Granero, Özil; Kaká, Cristiano Ronaldo e Higuaín.


Apoel: Chiotis; Poursaitides, Kaká, Paulo Jorge, Boaventura; Nuno Morais, Helio Pinto, Charalambides, Trickovski; Manduca y Ailton

Árbitro: Gianluca Rocchi (ITA).

Estadio: Santiago Bernabéu.

Hora: 20.45 (TV Autonómicas)

Eso sí, que nadie se piense que Mourinho programa un entrenamiento con público para esta noche. De haberlo hecho, hombres como Cristiano Ronaldo, Casillas, Özil o Benzema hubieran visto el partido desde las televisiones de sus respectivas casas, en pantuflas y con el pijama puesto. Sin embargo, Mou ha decidido convocar a todos los sanos salvo a Arbeloa, el único que tendrá el privilegio de descansar pensando en el Valencia porque Ramos está sancionado para ese encuentro frente a los de Emery. Igual sí que hubiera estado bien que algún canterano del Castilla hubiera entrado en esta citación, pero Mourinho es de ideas firmes, y la Champions, a pesar de que el Apoel viene derrotado, tiene todo su respeto.

Por eso, y a pesar de encontrarnos en pleno puente de Semana Santa, la gente que se acerque al Bernabéu podría disfrutar de lo lindo. Sin el corsé táctico que normalmente suele envolver un partido de cuartos de final de la Champions, el Madrid puede disfrutar y hacer disfrutar a su gente. Igual suena demasiado atrevido decir que no sería extraño que los blancos volvieran a repetir manita (sería la tercera consecutiva tras las endosadas a Real Sociedad y Osasuna), pero la sensación es que si el Madrid sale con la cuarta marcha, sin necesidad de forzar, el Apoel puede tener una triste despedida de la Champions. No por su trayectoria, impecable para lo que tiene, pero sí por el parcial de la eliminatoria ante los de Mourinho. Lo dicho, un trámite.