Antes y después de los partidos ante el Valencia y el Atlético de Madrid el portugués prefirió apartarse de los focos y ceder su silla en las salas de prensa a su segundo, Aitor Karanka. Algo que podría responde a una estrategia del portugués de no volver a hablar de aquí a final de temporada para los medios de comunicación, al menos antes y después de los partidos de Liga. Al luso le gustaría poder hacer lo mismo con motivo de la Champions, pero la UEFA obliga a que los técnicos comparezcan con motivo de sus encuentros.
Al parecer, no es la primera vez que Mourinho hace esto, pues en la temporada 2009/10 ya hizo lo propio dirigiendo al Inter de Milan. El resultado que obtuvo fue más que positivo, ya que su equipo acabó logrando el triplete: Liga, Copa italiana y Champions League. Así, el objetivo del portugués sería evitar polémicas, alejándose de los medios e impidiendo que la prensa pueda malinterpretar sus palabras o intentar desestabilizar al equipo en el tramo final de temporada. Desde este momento Mourinho solo quiere trabajar para conseguir los objetivos y para ello, prefiere alejarse de los focos y dejar el protagonismo a sus jugadores.
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