Una racha triunfal la del Dortmund que continuó en el Santiago Bernabéu. Y es que los de José Mourinho no pudieron ser los primeros en hacer morder el polvo al Borussia en la presente edición de la Liga de Campeones, dejando sin venganza la derrota sufrida hace pocas fechas en territorio teutón.
Las dos rachas, la victoriosa de los blancos en casa, y la no derrotista de los alemanes en la competición se midieron y, finalmente, el desenlace fue favorable a los alemanes. Un ejemplo más de que en Europa no hay regalos, y menos en un grupo como el del Madrid.
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