Para el ‘Buitre', el comienzo de la segunda parte fue clave: "Recibimos un tanto en el primer tiro a puerta de ellos. Luego empatamos y tuvimos el 1-2 de Özil, pero en su segunda llegada, de nuevo nos marcaron. No nos están favoreciendo las circunstancias. Esperemos que con el nuevo año, cambien", explicó.
La liga está "casi imposible", pero para el ex jugador blanco no hay que tirar la toalla: "Somos el Real Madrid y tenemos que seguir. Nos tenemos que levantar por el orgullo que supone llevar esta camiseta. Es una pena estar tan lejos del líder, pero no podemos hacer otra cosa que asumirlo", confirmó.
Por último, no quiso entrar en polémicas y dejó claro que "la decisión de dejar a Iker Casillas en el banquillo es decisión únicamente del entrenador. No entramos en ello. No hay ningún pulso de Mourinho hacía la plantilla ni nada por el estilo", finalizó.
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