El Real Madrid ha pasado tres cuartos de verano esperando a cerrar el traspaso de Cristiano Ronaldo, y hasta el momento no ha realizado ningún fichaje. Eso sí, las oficinas del Bernabéu no han dejado de echar humo en todo el periodo vacacional. Si bien el órdago ha sido por el portugués del Manchester, el conjunto blanco tenía bajo la manga un as guardado, el que puso en marcha en la última junta directiva, celebrada la pasada semana. O mejor dicho tres: Villa (Valencia), Diego (Werder Bremen) y Van der Vaart (Hamburgo).
Villa vale 40 millones
Desde antes de la Eurocopa Mijatovic ya había comunicado con el Valencia el interés blanco en "el Guaje", pero su eclosión definitiva en la Euro 2008 disparó la cotización del delantero. El Valencia fijó un precio de salida de 40 millones de euros, y el Madrid desechó la operación a principios del mes de Julio. No obstante, el retraso en la operación Ronaldo y lo revueltas que bajan las aguas desde Paterna con la irrupción y posterior destitución de Villalonga, han reavivado el interés del Madrid en Villa.
Emery ha comunicado al conjunto ché que no vendan a su delantero estrella bajo ningún concepto, pero el club sabe que Villa es uno de sus mejores activos, y tiene la necesidad urgente de cubrir el agujero económico que presenta el club. Por ello el alto precio del jugador. El Madrid ha cambiado su política, y puestos a gastar 85 millones en Cristiano, ha decidido que podría invertir menos de la mitad en Villa, que no olvidemos tiene 26 años, y todo un mundo de fútbol en sus botas. El asturiano sería el primer refuerzo a por el que el Madrid se lanzaría en caso de que Cristiano falle definitivamente.
El sueño que los blancos arrastran: Diego
Además, el Madrid sigue en la búsqueda de un media punta de proyección internacional, y hace tiempo que el brasileño Diego estaba en su punto de mira. El principal defensor de Diego en el equipo germano siempre ha sido su presidente, Klaus-Dieter Fischer, que llegó a asegurar el año pasado en la previa del partido ante el Madrid que se tendrían que llevar al brasileño sobre su cadáver. Pero la situación de Diego en el Werder ha dado un giro inesperado, y las relaciones con su presidente se han deteriorado mucho tras la fuga del ex santista a los Juegos de Pekín.
El conjunto alemán no quería dejarle jugar los JJ. OO., pero Diego ha puesto los pies en polvorosa y ha tomado un avión a China por su riesgo y cuenta. Su compañero Torsten Frings aseguró que "sabremos reponernos y jugar los tres partidos de principio de temporada sin Diego", mientras que Frank Baumann reconoce que "Diego es un jugador importante", pero señala que "podemos sustituirle, nadie es imprescindible". La marcha de Diego ha supuesto una ruptura con el club y con sus compañeros, y ahí es donde espera pescar el Madrid, que ya ha hablado con su padre, Djair da Cunha, que a la vez ejerce de agente del futbolista.
Primera oferta por Van der Vaart
El caso de Van der Vaart es el que más pronta resolución podría tener. Schuster lo ha señalado como el refuerzo para el centro del campo ideal venga o no venga Ronaldo. Además, el precio del holandés no es desorbitado. El jugador ya ha confesado que le gustaría vestir la casaca blanca, y el único obstáculo es el sí del Hamburgo, algo presionado por la intromisión de Arsenal y Chelsea en la contratación del oranje, lo que podría provocar que el jugador no pudiera abandonar la disciplina del club alemán por menos de 10 millones de euros.
El Real Madrid ya hizo una oferta inicial de 6 millones de euros al conjunto alemán, que éste ha rechazado en un principio, ya que el Arsenal también se ha interesado y está dispuesto en acercarse a los 20 millones de euros. Por ello, Mijatovic volverá a dirigirse al Hamburgo para al menos doblar la oferta, ya que cuenta con la ventaja de que el Madrid es la primera opción del holandés.
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