El Madrid paseó manita por Valencia

Los de Mourinho le endosaron cinco goles al equipo valencianista en los primeros 45 minutos. Gran partido de Di María. Exhibición de asistencias de Özil. Cristiano sigue en racha.





Después de unos cuantos días rajando de arbitrajes, alimentando la máxima presión posible contra el estamento arbitral y hablando de cualquier cosa menos de lo deportivo, pocos esperaban en Valencia que el Real Madrid se montara en Mestalla en el tren en modo paseo y acabara de un plumazo con toda la escabechina de declaraciones, lamentaciones y demás parafernalias de aquellos que vieron en el partido del pasado martes en el Bernabéu una mano negra.

Por cierto, y hablando de manos, la manita en Mestalla la dio el Madrid en apenas 45 minutos de partido. Ese fue el tiempo que necesitaron los de Mourinho para pasarse por la piedra al Valencia y ridiculizarle. El 0-5 con el que el partido se fue al intermedio derivó en pañolada. La misma que estaba preparada para cualquier decisión conflictiva del árbitro acabó siendo utilizada para el propio Valencia, martilleado por la velocidad de un Real Madrid mortal. En plan rodillo.

Vamos por partes. Que el Real Madrid tiene el contragolpe más espectacular y mortal del mundo seguramente no lo podrá negar nadie. Que a veces falla, también. Pero nadie puede cuestionar que este equipo con espacios puede dejar en pañales a cualquiera. En este caso le tocó al Valencia sufrir a un Madrid que curiosamente comenzó fallando una ocasión casi infallable. Fue Higuaín el que no atinó a convertir un pase desde la derecha de Di María en un remate desde el punto de penalti que en lugar de tocar la red fue a parar a las cámaras fotográficas que merodeaban la portería valencianista. Eso sí, sólo tardó dos minutos el argentino en resarcirse del error. El tanto argentino que volvió a formar con Di María derivó en asistencia del fideo y, esta vez sí, remate con la izquierda a la red del pipa. Los de Mourinho golpeaban primero. Serían cosquillas, comparadas con lo que quedaba.


Y lo fue porque a partir de ahí el Valencia su suicidó. Tiró la línea arriba para intentar atrincherar al Madrid, y lo único que hizo fue dejar que Özil luciera su mejor repertorio de asistencias, y que Di María volviera a lucir el mejor partido individual en muchos meses. Así las cosas, el argentino empezaba a abrir la herida rematando en el segundo palo una jugada excepcional de Cristiano Ronaldo en la banda izquierda. El portugués abusó de Ricardo Costa, improvisado lateral valenciano en esta noche. A buen seguro que soñará con CR7 después de volverle loco en este 0-2.

Ficha técnica:

Valencia: Diego Alves, Ricardo Costa, Rami, Víctor Ruiz, Guardado, Banega, Gago (Barragán, m.46), Tino Costa, Piatti (Bernat, m.77), Soldado (Valdez, m.65) y Jonas.

Real Madrid 5: Casillas, Arbeloa, Varane, Albiol, Coentrao, Xabi Alonso (Essien, m.63), Khedira (Callejón, m.74), Ozil (Modric, m.67), Di María, Cristiano Ronaldo e Higuaín.

Goles: 0-1, m.9: Higuaín. 0-2, m.35: Di María. 0-3, m.36: Cristiano Ronaldo. 0-4, m.41: Cristiano Ronaldo. 0-5, m.44: Di María.

Árbitro: José Antonio Teixeira Vitienes (colegio cántabro). Amonestó por el Valencia a Jonas, Gago y Banega, y por el Real Madrid a Arbeloa, Coentrao, Di María y Essien.

Incidencias: partido disputado en Mestalla ante 40.000 espectadores, de los que muchos abandonaron el estadio en el descanso

No se quedaría sólo en esa asistencia el aporte de Cristiano al partido. De hecho, una nueva contra, con un gran pase al hueco de Coentrao, le permitía al delantero merengue presentarse cara a cara con Alves y resolver con la izquierda al primer palo. El 0-3 motivó el primer run run de un estadio, Mestalla, que empezaba a olfatear que hoy el Madrid tenía ganas de golear. Unas ganas que siguieron en aumento, después de que Özil usara una nueva asistencia, en esta ocasión al primer toque, para que Cristiano volviera a marcar. Era su doblete y el cuarto de los merengues. Tampoco iba a ser el último del primer acto, ya que Di María volvería a presentarse en las narices de Alves, tras una nueva asistencia de Özil, y haría el agujero un poco más grande. Por abajo y raso. 0-5 al descanso, y Mestalla vivía su particular Halloween con algunos meses de retraso.

El segundo tiempo fue el típico que firman el equipo que no quiere más, en este caso el Real Madrid, y el que tampoco puede dar más, el Valencia. El equipo local lo intentó en los primeros compases del segundo acto, tirando de aquello que denominan vergüenza torera. Así, Piatti estrelló un balón en el larguero, y Coentrao tuvo que sacar bajo palos un remate de cabeza del central Rami. Tampoco hubo mucho más de los de Valverde en el segundo acto.

Los de Mourinho, con la mente puesta en el mismo rival, en el mismo estadio pero ya en otra competición, se dedicaron a salvaguardar piernas y pulmones después del trabajo sobradamente bien hecho del primer tiempo. Aun así, Cristiano Ronaldo tuvo la oportunidad de lograr su hat trick con un remate a escasos metros de la portería de Alves que se le escapó por un pelo. No hizo falta más, con medio tiempo el Madrid desnudó al Valencia y avisó a Mestalla recordando que es el campeón, y que si tiene campo abierto, sus estampidas son imparables.