Cristiano, en un lugar raro: el banquillo

El astro portugués no fue titular en Riazor por primera vez en Liga desde 2011





José Mourinho cumplió este sábado con una de las posibilidades que se barajaban al respecto de las rotaciones. No eran pocas las voces que hablaban de que Cristiano Ronaldo sería suplente en Riazor, y por una vez acertaron, aunque era una situación de lo más previsible. Con el partido ante el Barcelona en Copa a la vuelta de la esquina, qué mejor momento de dar descanso al líder del equipo que, con todo el respeto, ante el colista en un encuentro intrascendente.

El delantero portugués se quedó en el banco de Riazor, al igual que pasó el pasado 27 de noviembre en el partido de vuelta de Copa del Rey (1-4 en la ida) ante el Alcoyano y en el encuentro ante el Dinamo de Zagreb de la sexta jornada de la fase de grupos de la pasada Champions. En las últimas dos temporadas, sólo en estas tres ocasiones se había dado la situación de ver a Cristiano en el banquillo. El resto de ocasiones que no jugó se quedó directamente en la grada, por sanción o por lesión.

A última hora, el 1-0 obligó a Mourinho a echar mano de su estrella. El portugués le dio un aire muy distinto al equipo, que carburó mucho mejor con él sobre el césped y logró la remontada gracias a su buen hacer.