Higuaín y Callejón, ambos en la primera mitad, abrieron la veda de los fueras de juego que no fueron. Primero el argentino se quedaba solo ante Roberto, pero el asistente levantó el banderín. Un minuto más tarde, más de lo mismo con José Callejón. En ambos casos, no existía infracción de los madridistas, que estaban habilitados por sendos defensores maños.
En la segunda mitad, Cristiano Ronaldo se encontró en la misma situación. Balón largo para el luso, que iba a encarar la meta rival y hubo de detenerse por un fuera de juego inexistente. En el área contraria, el Zaragoza pidió un posible penalti de Essien a Postiga. Lo cierto es que el ghanés agarró ligeramente al luso, pero insuficiente para señalar la pena máxima, más aún teniendo en cuenta que el delantero local recibió la bola en posición antirreglamentaria. A falta de quince minutos, Undiano perdonó la roja a Movilla por un codazo a Khedira.
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