Al Madrid le salió un empate soso

Los blancos no hicieron un gran partido en Zaragoza y no pudieron pasar del empate a un gol ante el equipo maño.





La visita a Zaragoza para el Real Madrid estaba incluida en un sándwich de post selecciones y víspera de Champions. Ante esta tesitura era de esperar que Mourinho hiciera lo hizo, cierta dosis de rotación dentro de su plantilla. Una mezcla de titulares con otros que no lo son tanto que hizo ver a un Madrid muy del estilo de las últimas salidas a Riazor o Vigo.

En este sentido cabe decir que el Madrid salió con los ojos abiertos, aunque sin aparente munición. El Barcelona había empatado en Vigo, y hay quien esperaba una salida camicace, al cuello del Zaragoza. Nada más lejos de la realidad. De hecho, si el primer golpe se lo comió alguien ese fue el equipo de Mourinho, al que una pelota en el centro del campo desnudó su línea defensiva de tal forma que Rodri se encontró delante de Diego López. Amagó con la cintura y remató con la diestra. Gol. Así en frío, al Madrid ya le tocaba ponerse el mono para remontar.

Mourinho no terminaba de ver claro que su equipo pudiera lograr el empata, y empezó a mover fichas desde el banquillo. Xabi Alonso y Di María ya calentaban en la banda, mientras Higuaín caía en fuera de juego, Cristiano lo intentaba, y Callejón y Kaká realizaban desmarques con más intención efectividad. En estas, una pelota que le quedó a Cristiano Ronaldo dentro del área a pierna izquierda acabó en la red del Zaragoza por la calidad en el golpeo del portugués. Higuaín fue el que le dejó el cuero al luso, Cristiano superó la entrada de dos defensas, y acabó haciendo inútil la estirada de un Roberto que no se esperaba que esa pelota acabaría en el lugar que terminó, la portería de los locales. Antes del descanso, Essien estuvo a punto de voltear el marcador con un gran remate de cabeza que despejó el cancerbero zaragocista.


Ficha técnica

ZARAGOZA 1: Roberto; Sapunaru, Álvaro, Loovens, Abraham; Movilla, Apoño (Romaric, min.52), Oriol (Wílchez, min.83), Rodri (Víctor Rodríguez, min.63), Montañés y H.Postiga.

REAL MADRID 1: Diego López; Arbeloa (Khedira, min.60), Pepe, Sergio Ramos, Marcelo; Modric, Essien; Callejón (Di María, min.60), Kaka (Özil, min.60), Cristiano e Higuaín.

GOLES: 1-0, min.6, Rodri. 1-1, min.38, Cristiano Ronaldo.

ÁRBITRO: Undiano Mallenco (C. Navarro). Amonestó a Loovens (min.12), Rodri (min.58), Álvaro (min.86) y Sapunaru (min.92) por parte del Zaragoza. Y a Modric (min.11), Arbeloa (min.55) y Ramos (min.67), por parte del Real Madrid.

ESTADIO: La Romareda (27.000 espectadores)

Que no era el partido más brillante del Real Madrid parecía evidente. Tampoco es que hubiera un hambre atroz por buscar ese gol que le hubiera dado la victoria. El mejor tramo de la segunda parte, y del partido, para los de Mourinho llegó tras el descanso, momento en el que llegó la ocasión más peligrosa de los blancos, en un buen balón interior de Callejón a Cristiano Ronaldo que rechazó Roberto, y que posteriormente le cayó a Marcelo. El brasileño tiró de fuerza para rematar el balón y sólo el poste pudo impedir el encuentro con la red de la portería. Era el minuto 48 y, a groso modo se puede decir que ahí acabó el verdadero peligro del Real Madrid en el partido, pues poco más se supo ofensivamente hablando de los Cristiano, Higuaín y compañía.

De hecho, como Mourinho veía pocas ganas de victoria, introdujo un cambio triple. Kaká, Callejón y Arbeloa se marcharon y entraron Khedira, Özil y Di María. Tampoco varió demasiado la cosa. El más activo fue Di María, que lo intentó más que nadie, aunque entre patadas y golpeos fuera su fútbol no produjo algo positivo. Ni Xabi Alonso ni Benzema tocaron el césped. En Zaragoza sólo notaron sus presencias por su marca en la silla del banquillo. Se puede tomar como pista para el miércoles, especialmente en el caso de Xabi. En el de Benzema lo dejaremos como un misterio a resolver en las próximas horas.

Con el Madrid carente de mordiente hay que destacar a Diego López como el mejor de los blancos. Una parada sensacional a Postiga en un remate de cabeza en el segundo palo del portugués adornó su actuación en plena semana de inicio de debate en la portería blanca tras la recuperación de Iker. No hubo más. Esta vez el que no le echó sal a la sopa fue el Madrid, por eso cocinó un empate soso. Aburrido. La cena del miércoles se espera sea más copiosa. Debería serlo.