El judo fue decisivo para que Zidane trajera la Novena

Los datos más curiosos de la vida de los jugadores y el entrenador del Real Madrid


Zinedine Zidane, Novena, Reportaje

Zinedine Zidane marca el gol de la Novena




Los padres de Zidane siempre quisieron que su hijo practicase deporte y siendo muy pequeño comenzó a practicar judo. ‘Zizou’, que apenas levantaba un metro desde el suelo acudía a las clases con el profesor y empezó a demostrar una gran destreza para este arte marcial de origen japonés. De hecho, poco a poco fue subiendo de nivel y llegó a alcanzar el cinturón verde, que es el cuarto escalafón.

Los profesores estaban encantados con la progresión del pequeño Zidane, sobre todo por su capacidad para realizar movimientos y mantener el equilibrio. Algunos ya le auguraban un gran futuro en este arte marcial. Sin embargo, cuando era cinturón verde, ‘Zizou’ ya jugaba al fútbol con los amigos en el colegio y en el parque y le empezó a picar el gusanillo y pidió a sus padres que le apuntaran a un equipo.

El remate de Zidane visto desde atrás
Fue entonces cuando dejó el judo para centrarse en el fútbol. Sin embargo, Zidane no olvidó lo aprendido sobre un tatami y decidió que lo seguiría utilizando sobre el césped. Así comenzó una carrera cargada de movimientos espectaculares y saltos inverosímiles que culminaron con aquel golazo en Glasgow con una volea inalcanzable para el resto de futbolistas.

La decisión de los padres de Zidane de apuntarle a judo cuando era muy pequeño había marcado el camino para la consecución de la Novena Copa de Europa del Real Madrid. ‘Zizou’ supo canalizar todo lo aprendido sobre un tatami, que fue mucho, y dirigirlo para tener una relación más que especial con el balón. Y es que todos tenemos grabados en la mente muchos de esos movimientos mágicos de Zinedine.