Tenía el propósito, desde que era un joven que despuntaba en La Louviére, de jugar algún día en el Real Madrid. El 13 de junio del 2019, ante más de 50.000 aficionados, el coliseo blanco se engalanó para recibirlo y para hacer que el crack del Chelsea (TOP-5 mundial, sin duda alguna) cumpliera su sueño. Ha llovido mucho desde entonces. La situación ha cambiado por completo.
El 5 de diciembre del 2019, meses antes de que estallase la crisis del coronavirus, Hazard sufría una durísima lesión: una fisura en el pie en el Real Madrid-PSG. Meunier le rompió la carrera y fue el principio del fin. Eden, hasta ese momento, destacaba con la elástica blanca, pese a estar negado con el gol, y mostraba una calidad infinita de blanco. Ese día, de hecho, estaba viviendo su mejor partido como madridista.
Todo cambió desde entonces y la fisura del pie provocó un espiral de lesiones. Una tras otra. Siguió con una fisura del peroné, golpe, traumatismos, lesiones musculares, lesión de muslo y otra fisura en el peroné. En total, desde entonces, se perdió cerca de 60 partidos. Un auténtico drama.
Un año más de contrato
Tiene contrato hasta el 30 de junio del 2024 y todavía tiene un año por delante. A sus 32 años, su situación parece muy complicada. Hazard no levanta cabeza. El belga tiene muy poco dónde agarrarse. Su forma física no le acompaña y siempre ha llevado esa durísima etiqueta encima. Incluso para el propio staff técnico que apenas le da bola.
Solo ha jugado 286 minutos en la presente temporada y la situación pinta muy fea para el de Bélgica. Solo 1 gol y 1 asistencia en los 60’ que tuvo contra el Celta sustituyendo a Benzema. No juega en Champions desde el 25/10/22, en Liga no lo hace desde el 11/09/22 y en Copa pasó sin pena ni gloria, únicamente en la eliminatoria contra el Cacereño, el 03/01/22. Y a partir de ese día regresó al banquillo y no ha aparecido ni para calentar. Una piedra en el zapato para Carlo Ancelotti.
Él quiere renovar
Se resiste a dar por perdido el sueño de su vida y quiere renovar su contrato como madridista. Hazard está a la espera de oportunidades y considera que está realizando unos entrenamientos impecables para contar con esa posibilidad. Ancelotti se la niega, de momento, aunque el calendario es largo y podría ocurrir cualquier cosa. Ahora mismo, eso sí, es más una carga que una ayuda.
Opción exótica
Su salario es el más alto de la plantilla actual y eso no juega en favor ante una posible salida. Él quiere quedarse, pero parece complicado que algún club asuma, tan siquiera, la mitad de ese montante económico que se lleva cada mes. Hazard no pierde de vista la opción de irse a Arabia Saudí, a la MLS y tener una retirada dorada (y anticipada).
La vía inglesa
Tampoco nos podemos olvidar de la vía de regresar a la Premier League y volver a Inglaterra. Hazard tiene abierto ese camino, aunque solo falta un comprador potente que así se lo permita. De momento no ha aparecido… y en el seno madridista de la directiva tampoco se espera. Irse a la Serie A es otra posibilidad.
Factor Zidane
Zinedine Zidane es su otro factor clave. El de Marsella está obsesionado en volver a ver a Hazard a su mejor nivel, así como lo estuvo en su día con Paul Pogba, y saber qué será del entrenador francés es clave, a su vez, para entender por donde puede tirar el siguiente paso el culebrón de Hazard. Ir a Italia y fichar por la Juventus lo acercaría, sin duda alguna, al club bianconero de la Serie A. Más de lo mismo si ficha por el PSG o si termina aceptando otra aventura en la máxima élite. Cabe prestarle muchísima atención ya que ambos pueden ir de la mano.
En el Real Madrid, a priori, no parece ser que haya ninguna posibilidad. Acaba contrato en 2024 y en el club blanco no están por la labor, en ninguno de los casos, de quedarse con Eden Hazard más allá de ese plazo de tiempo.
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