Las jugadas polémicas que le han dinamitado la Liga al Real Madrid

El Real Madrid dijo adiós a la Liga en el Camp Nou.


Polémicas arbitrales

Polémicas arbitrales




Cuestión de un ‘frame’, o dos, pero lo cierto es que el campeonato nacional se le pone demasiado cuesta arriba a los de Carlo Ancelotti y, nuevamente, la polémica volvió a asomarse como gran protagonista en un Clásico.

Nadie olvida ese Barça-Madrid en el que Lenglet le clavó los tacos a Varane y en el que quedó patente la premeditación de esas acciones arbitrales, con alevosía, para robar deportivamente a los madridistas. No fue un escándalo tan grande y fue cuestión de milímetros, pero el enfado en el rostro de la expedición blanca fue muy similar. Al Real Madrid siempre le ocurren cosas extrañas (y, curiosamente, siempre ante los mismos).

En pleno ‘Barçagate’

La designación arbitral de Ricardo De Burgos Bengoetxea y Soto Grado no gustó en Valdebebas. Sí que gustó en la Ciudad Condal. Un doble rasero que demuestra muchas cosas, en pleno ‘Barçagate’ y con el ‘caso Negreira’ en ebullición. 

No fue tan flagrante, pero sí que perjudicó realmente a los madridistas. Y no es la primera vez. Si tiramos de hemeroteca, en esta misma temporada, ya encontramos sendos errores en los que se marcó un criterio que perjudicó a los madridistas.


La brecha liguera

No hace falta irse muy lejos. La Liga está a 12 puntos y debería estar, máximo, a 3 puntos de desventaja. El Real Madrid se ha deshinchado deportivamente por motivos técnicos y por los que hay que hacer mucha autocrítica, sí, pero no es menos cierto decir que también han influido decisiones arbitrales que un estadio se pitan de una manera y en otro de otra. Sin ir más lejos, en las últimas semanas, encontramos el caso del Barça-Valencia y del Real Betis-Real Madrid.

Una jornada fatídica

En el Camp Nou no se señaló (con 1-0) un penalti claro de Kessié sobre Fran Pérez. Al Valencia le privaron esa opción de empatar y el partido tenía tendencia a ello. Y lo mismo sucedió en el Benito Villamarín, en el Real Betis-Real Madrid, con un pisotón claro sobre Karim Benzema dentro del área que era penalti y que no se señaló. 0-0 y 1-0. Vayan haciendo sus particulares cuentas.

La polémica de Bilbao

Más de lo mismo en el Athletic Club-FC Barcelona. Frenkie de Jong cometía juego peligroso en una jugada de ‘mano’ de Iker Muniain que terminó con un gol de Iñaki Williams que terminaría siendo anulado. Ese resultado le permitió al Barça seguir con la misma brecha de puntos respecto al Real Madrid que había ganado al Espanyol, 3-1, y que apretaba la Liga en la jornada diurna del Bernabéu.

El despropósito del VAR

En esas llegamos al despropósito del VAR en el Camp Nou. Lo que no pitó y no vio, o lo que no quiso pitar. Hay jugadas que lo confirman: la agresión sin balón de Gavi a Ceballos debió terminar en expulsión y dejar con 10 al Barça en el tramo final de partido. No fue así y, de hecho, todo acabó con un gol inexplicablemente anulado desde la sala VOR a Marco Asensio.

Las líneas, paralelas, demostraban el entramado arbitral. Al Real Madrid le quitaron esa posibilidad del 1-2 y, no contentos con ello, en el gol de Frank Kessié que sí que supuso el verdadero 2-1 se debió pitar una falta inicial de Robert Lewandowski sobre Dani Carvajal, sin balón, que determina toda la jugada y que deja sin defensa por el costado izquierdo al Real Madrid. Indefendible.


REPORTAJES - DEFENSA CENTRAL


Otras polémicas

También cabe destacar jugadas como la mano de Asensio frente al Girona que le costó puntos al Real Madrid en el Bernabéu, y que nadie terminó de entender, en otro de esos encuentros que hubiera apretado la Liga y que permitiría que esa actual diferencia entre ambos equipos en la tabla clasificatoria estuviera mucho más reducida.

Autocrítica

En Valdebebas, pese a esos deslices arbitrales, son conscientes que no todo se basa en el arbitraje. Toca hacer mucha autocrítica en esta semana de parón internacional y también toca pensar y meditar, qué jugadores deben seguir de cara a la próxima temporada y cuáles deben dar un paso atrás y dejar espacio al cambio generacional que no se hizo tras ganar la Decimocuarta Copa de Europa en París frente al Liverpool.