El buen presagio se cumplió 50 años después

El Real Madrid hizo bueno el 3-2 logrado en la ida

Antes de jugar este martes en Málaga, el Real Madrid viajaba a la ciudad andaluza animado por un buen precedente histórico. En 1951 los blancos se encontraban en la misma situación que en la actualidad, pues en la ida de los octavos de final de la Copa del Generalísimo habían vencido por 3-2 en el Santiago Bernabéu al Valencia. En la vuelta el resultado fue de 1-5, de manera que los de Mourinho tenían como objetivo emularlo consiguiendo un marcador también positivo.

Con el triunfo cosechado este martes en La Rosaleda, los madridistas han certificado tres finales felices de eliminatoria en las cuatro situaciones en las que se han encontrado con un 3-2 copero logrado en el encuentro de ida. Y es que, junto a la del año 1951, en 1947 los blancos se midieron al Athletic y tras vencer por la mínima en casa hicieron lo propio en Bilbao (0-1) gracias a un gol de Molowny.

La única vez que podía inducir ligeramente al pesimismo era la de 1987, cuando el Atlético de Madrid logró remontar en el Vicente Calderón el 3-2 inicial con un marcador de 2-0. Aquella fue la última ocasión para el club blanco en el que había cosechado este mismo marcador en el encuentro de ida, por lo que ahora 24 años después ha podido desquitarse de ese mal sabor de boca eliminando al siempre peligroso Málaga de Manuel Pellegrini.



Reportajes DC