Ventaja de Celtics y Wizards se anima





La espera sigue dentro de la Conferencia Este para conocer a los tres equipos que se unan a los Magic de Orlando en las semifinales.

La pasada jornada dejó el triunfo esperado de los Celtics de Boston que ganaron 110-85 a los Hawks de Atlanta para ponerse con la ventaja de 3-2 al mejor de siete.

Mientras, los Wizards de Washington, a pesar de la baja por lesión de su jugador estrella, el base Gilbert Arenas, llegaron a Cleveland para ganar 88-87 al equipo local de los Cavaliers y mantenerse con vida en la eliminatoria que van perdiendo por 2-3.

Esta vez no hubo sorpresa como las dos derrotas que sufrieron los Celtics en su visita al Philips Arena de Atlanta, donde volverán el viernes para enfrentarse en el sexto partido de la eliminatoria después de conseguir la victoria en el quinto.

Un partido que resultó brusco cargado de faltas técnicas, flagrantes y expulsiones que al final beneficiaron a los Celtics, que volvieron a tener a sus tres jugadores estrellas lideres del ataque imparable.

El alero Paul Pierce, con 22 puntos, siete rebotes y seis asistencias, encabezó una lista de seis jugadores que anotaron en doble dígitos, para los Celtics, que también tuvieron un 53,6 por ciento de acierto en los tiros de campo, el 45,0 (9-20) de triples

La estrella Kevin Garnett aportó 20 puntos con siete asistencias y cinco rebotes, mientras que el escolta Ray Allen logró 19 tantos y repartió cuatro pases de anotación.

El veterano base Sam Cassell, que salió como reserva, consiguió 13 tantos para liderar la aportación de los jugadores del banquillo, que fue de 35 tantos, comparados a los 14 de los Hawks.

Cassell, con nueve puntos en el segundo cuarto, y el alero Leon Powe, que aportó 10 al concluir el partido, fueron decisivos en el juego de los Celtics, que se han visto sorprendidos por la dureza de una serie que todo el mundo había pronosticado de barrida por 4-0.

Wizards-Cavaliers

La inspiración de Butler y el fallo de James forzó la disputa, el viernes, del sexto partido en el Verizon Center de Washington, donde los Wizards tendrán que volver a ganar si quieren mantenerse con vida al ir perdiendo 2-3 la eliminatoria al mejor de siete.

Butler, que aportó 32 puntos, nueve rebotes y cinco asistencias fue el mejor jugador de los Wizards, que con 1:47 para concluir el partido, estaban abajo cinco tantos en el marcador.

Los Wizards con la inspiración de Butler y el escolta DeShawn Stevenson, que aportó 17 puntos, hicieron posible el milagro del triunfo y además rompieron una racha de cinco derrotas consecutivas en Cleveland durante la competición de la fase final.

La victoria de los Wizards tuvo doble valor porque la consiguieron sin que el alero Antawn Jamison hiciese su mejor partido, al aportar sólo ocho tantos con 11 rebotes, y tampoco estuviese con ellos el base estrella Gilbert Arenas, que fue baja por lesión.

Antes del comienzo del partido, Arenas anunció que no volverá a jugar esta temporada al no poderse recuperar por completo de las molestias que afectan a sus rodillas.

Los Wizards, que en el cuarto partido disputado en el Verizon Center lo habían perdido con canasta del base Delonte West cuando quedaban cinco segundos para concluir el tiempo reglamentario, le devolvieron, de visitantes, la misma moneda a los Cavaliers.

James estuvo en su línea de líder de los Cavaliers al conseguir 34 puntos, 10 rebotes y siete asistencias, pero no pudo anotar la canasta decisiva que hubiese dado la clasificación a los Cavaliers, que han eliminado dos temporadas consecutivas a los Wizards.

El pívot lituano Zydrunas Ilgauskas aportó 19 puntos con cuatro rebotes para ser el otro jugador de los Cavaliers que logró doble dígitos, mientras que el equipo se quedó con sólo un 39,4 por ciento de acierto en los tiros de campo.

El último fallo de James llenó de júbilo a los jugadores de los Wizards, especialmente a Stevenson, que de nuevo mostró un duelo personal y profesional con la estrella de los Cavaliers, de quien dijo que estaba sobrevalorado con su juego.

El dueño de los Wizards, Abe Polin, de 64 años, el martes había hablado con todos los jugadores del equipo para comentar sobre los triunfos y fracasos que el equipo había logrado en la fase final de la competición, incluida alguna remontada de 1-3 en las series al mejor de siete, algo que pueden lograr de nuevo.