"Prefiero sinceramente que todos seamos jugadores sucios"

"Cuando estábamos ganando, todo el mundo era feliz. En cuanto empezamos a perder, por cinco o diez puntos, todos empezaron a darlo por perdido. Tenemos grandes jugadores con mucho carácter, pero pensamos: "Con tantos buenos jugadores, esto no va a ser mi culpa, va a ser culpa de otro". Sólo nosotros podemos ayudarnos", reconoce Jaric, que considera que al Madrid sufría "falta de carácter" cuando llegó al equipo.

En una interesante y amplia entrevista concedida a 'El País', el jugador serbio desvela sus gustos en cuanto a jugadores. "Hay jugadores que se dedican a insultar a los rivales, buscar roces, provocar... que son necesarios. Prefiero sinceramente que todos seamos jugadores sucios. No deberíamos tener uno solo. Si sólo tienes un tipo así, es muy fácil para el árbitro verlo. Si todos jugamos muy agresivos, muy sucio... Entonces, mire, el árbitro no puede pitar un millón de faltas. Si ésa es nuestra mentalidad como equipo, no jugar sólo sucio, porque nunca intentaría lesionar a nadie, y hay jugadores que, de hecho, intentan golpearte, hacerte daño... Hay que hacer cualquier cosa para ganar. Lo que sea. Me gustan mucho los jugadores así".

Jaric, que viene de una liga tan competitiva como la NBA, declara que ésta "es una Liga de hombres". "No hay sitio para los lloros, para decir: "Soy un jugador de equipo". Yo lo soy, pero, si en tu equipo nadie lo es, ¿qué hacer? Necesitas adaptarte y jugar como ellos. No es fácil, pero los más fuertes sobreviven", confiesa.

Pese a su breve tiempo en la capital española, Jaric ya ejerce de líder del equipo. El prometedor Velickovic ya recibe sus chcarlas. "Él y otro par de jugadores jóvenes que tenemos son muy buenos. Les he dicho que la diferencia de jugar para el Madrid es que todos los partidos cuentan, que no puedes jugar un partido bien, que hay que jugarlos todos bien. Hay que ganarles a todos. Eso, con todo el respeto, no ocurre, por ejemplo, en el Murcia. En el Madrid todos los que jueguen contra ti querrán arrancarte el corazón, quitarte el sitio. Hay que ser capaz de actuar a cada segundo porque, si tú no estás preparado, hay uno en el banquillo que sí lo está".

Por otro lado, pese a las dudas sucitadas por su posible estado físico, el base madridista reconoce que se pasó "todo el verano trabajando, estoy en forma físicamente", aunque reconoce que "todavía estoy un poco pesado".

Ahora, con un dispar discurrir de su equipo por la ACB y la Euroliga, llega la Copa del Rey, una competición breve e intensa en la que la veteranía de la plantilla madridista puede jugar a favor de los blancos. "Estamos preparados. Tenemos jugadores mayores, pero también muchos jugadores. No hay que olvidarse de eso. Tenemos la suerte de estar en un equipo que puede permitirse tener 12 grandes jugadores. Otros tienen cuatro o cinco", concluye.