La dimisión de Messina ha sido la gota que ha colmado el vaso para Berserkers, que dio muestras de su disconformidad con lo ocurrido el pasado sábado. Los peñistas abandonaron el estadio durante el primer cuarto, tras recibir al equipo con una sonora bronca.
Sin embargo, la dimisión del italiano no es el punto principal del enfado de estos aficionados, sino la desconsideración del club con la sección de baloncesto. La marcha de Messina no ha hecho más que confirmar que “algo se tiene que estar haciendo mal” en la sección. La peña asegura que se trata de “un cúmulo de circunstancias, algunas de las cuales llevan produciéndose varios años”.
El comunicado manifiesta su descontento con lo ocurrido en los últimos quince años, en los que el club más laureado del baloncesto europeo ha perdido su posición de privilegio, según éste cada vez más discutida. Del mismo modo, aprovecha para reclamar más respeto por parte de los jugadores, y para criticar su actitud en algunos casos.
Además, muestra su apoyo al actual cuerpo técnico, y solicita al club “una reflexión seria, sosegada y con vistas al futuro de la sección por parte de los dirigentes del Club en la que se evalúen qué cosas se están haciendo bien y qué cosas mal en aras de mejorar y de buscar un futuro más esperanzador”.
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