"Estoy muy emocionado por volver a Madrid. Ha sido el partido más difícil de mi vida, de verdad. Esta es mi casa. El tiempo aquí ha sido maravilloso. Nunca pensé que la gente me quisiera tanto, es un día que no pensaba que ocurriera", afirmó el extranjero con más partidos del cuadro blanco en declaraciones a la Telemadrid.
El norteamericano vivió un doble homenaje. El primero, el institucional, consistió en la entrega antes del partido de una placa y una camiseta con el número 234 por parte de Felipe Reyes, la cantidad de partidos que disputó con la elástica merengue.
El segundo homenaje fue el más sentido. Al final del partido los Berserkers (el grupo de aficionados más numeroso de la sección de baloncesto merengue) desplegó una pancarta con el lema "Siempre dulce, Siempre Lou" y le entregó una fotografía. Después de esto, Bullock dio una vuelta a la Caja Mágica recibiendo una ovación por parte del público existente.
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