Katsikaris y Dikoudis animan a Lázaros a marcharse al Pamesa

Los valencianos no pueden hacer frente a su elevada ficha





El dilema que ahora mismo ronda la cabeza de Papadopoulos es claro: perder dinero y marcharse, bien al Pamesa bien a su país, o quedarse en Madrid a "disgusto". La pelota está sobre la mesa del internacional griego, que debe decidir su futuro en las próximas fechas.

El proyecto que está formando el Pamesa Valencia es del agrado de Lázaros. Allí se encontraría con el entrenador Katsikaris y, si las cosas no se tuercen, con el también griego Dimos Dikoudis, que está a un paso de firmar por el equipo valenciano. La parte emocional estaría sobradamente cubierta. Dos buenos amigos de Lázaros, con una temporada de experiencia en nuestro país, y puesto de pívot indiscutible garantizado, toda vez que Rubén Garcés abandonó el equipo con destino a Zaragoza.

Sin embargo, a Papadopoulos le cuesta dejar el Real Madrid, no por el aprecio al club ni a su entrenador (no se aguanta con Joan Plaza), sino por el aspecto económico. Los más de dos millones de euros que cobra por temporada son un caramelo envenenado para cualquier economía de club de baloncesto que se precie, por lo que el Real Madrid no vería con malos ojos la salida de un jugador que no ha dado el rendimiento que se le presupone a un jugador de su caché.