La FIBA quiere dieciséis equipos a partir de Londres 2012

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La Federación Internacional de Baloncesto (FIBA) quiere ampliar el número de equipos participantes en los torneos olímpicos masculino y femenino a partir de Londres 2012, ampliación sobre la que el Comité Olímpico Internacional (COI) se pronunciará oficialmente el próximo diciembre. El australiano Bob Elphiston, presidente de la FIBA, y el suizo Patrick Baumann, secretario general de la Federación Internacional de la canasta, anunciaron la intención de ampliar los torneos de baloncesto de los Juegos en una conferencia de prensa en la que celebraron Pekín 2008 como un acontecimiento "en el que todo han sido buenas noticias" para el deporte que representan.

"En Pekín no hemos podido tener a todos los equipos que merecemos. Queremos dieciséis equipos desde Londres 2012, pero la decisión final no depende de nosotros. Esperamos que el éxito de Pekín nos permita tener una competición más amplia. La decisión se tomará en diciembre de este año. Con el éxito de Pekín tenemos nuevos argumentos, mejores argumentos y argumentos más fuertes -para ampliar la competición olímpica-", explico Baumann. El suizo citó como ejemplo de la pujanza del baloncesto el hecho de que "cuatro países tan fuertes como Italia, Francia, España y China quieren el Mundial 2014, lo que demuestra la popularidad" de esta especialidad.

"Las cinco abanderados del baloncesto -en la ceremonia de inauguración- hacen que la familia del baloncesto se sienta muy orgullosa, continuó el secretario general de la FIBA en el comienzo del repaso a los torneos de los Juegos chinos. "No hemos estado cerca de las otras sedes, pero las entradas estaban vendidas mucho antes de que empezara la competición. Hemos tenido muchos problemas para acomodar a todas las personalidades que ha venido al palco. La gente quería entradas y, en la reventa, que es ilegal, se han pagado cientos de dólares por las entradas", prosiguió.

Bauman también destacó la audiencia del encuentro entre China y los Estados Unidos, que reunió a veintisiete millones de espectadores en la nación americana y cien en el asiático: "La realidad es que esta partido ha conseguido unas enormes audiencias no solo en los dos países, también en España, en Grecia y en varios países más". "Wukesong es una sede magnífica, que se ha construido muy rápido y es una de las mejores sedes que se pueden encontrar en Asia. Es la primera de una serie de sedes que se construirán en el futuro. Ha sido una sede perfecta", aseguró el suizo.

El directivo de la FIBA subrayó que el baloncesto también ha sido foco de atención para "las grandes estrellas como Michael Phelps y -Diego Armando- Maradona. Es la expresión de la popularidad del baloncesto en todo el mundo". Bob Elphiston, presidente del baloncesto mundial, afirmó por su parte que Pekín 2008 "es el torneo de mayor éxito de los Juegos Olímpicos desde la entrada de baloncesto en el programa olímpico, en 1936".

"Ha sido el más visto y el que más espectadores ha tenido. Ha habido grandes partidos, como los disputados entre España y China y el que Argentina ganó a Grecia por dos puntos." "Es muy importante que cuatro continentes hayan tenido representación en los cuartos de final. También ha sido importante para la nación organizadora haber llegado a cuartos". Elphiston alabó al "extraordinario equipo que representa a Estados Unidos y que incluye a los mejores jugadores del baloncesto NBA, que han demostrado un tremendo respeto hacia todos los rivales y un gran entusiasmo".

"También el torneo femenino ha seguido creciendo. Letonia, Bielorrusia y la República Checa son un ejemplo, así como la presencia de China, un equipo muy equilibrado, en las semifinales", agregó. El australiano apuntó muy particularmente que "en cuanto a la televisión, ha sido el torneo más visto de la historia y, en la noche de inauguración, el China-Estados Unidos tuvo veintisiete millones de estadounidenses en directo de madrugada y, en China, cien millones".

"Han sido momentos muy especiales para el baloncesto", dijo Elphiston, quien también destinó palabras de orgullo por los cinco jugadores que abanderaron a sus países en la ceremonia de inauguración (el alemán Dirk Nowitzki; el ruso Andrei Kirilenko; el argentino Manu Ginobili; el chino Yao Ming y el lituano Sarunas Jasikevicius).