La plantilla del Real Madrid no sufrirá demasiados cambios para la próxima temporada. No habrá más cambios que los obligados por las salidas de Mirotic o Draper, hasta el momento. La llegada de Maciulis, por tanto, supone la salida de otro jugador, uno de los aleros. Podría ser Darden, aunque Laso quiere que siga. Dani Díez tiene más papeletas.
Por su parte, Nocioni ocupará la posición de Mirotic y Campazzo la de Draper, como tercer base del equipo. De este modo, el Real Madrid cubrirá las tres bajas sufridas sin salirse del presupuesto de la sección de baloncesto. Los blancos quieren volver al asalto de la Euroliga el curso que viene, y los tres hombres que llegarán tienen categoría para hacer soñar.
En principio, la idea de Juan Carlos Sánchez y Herreros es no tener que dar más bajas y no tener que afrontar más incorporaciones que las tres que ya están en el horno. De este modo, en unos días podríamos estar hablando de una plantilla y un cuerpo técnico cerrados para el Real Madrid, al contrario de lo que habría pasado si Katsikaris hubiera sustituido Pablo Laso.
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