Fue la temporada 2002/2003 en una tremenda lucha a lo largo de la temporada entre los blancos, los donostiarras y el Deportivo de la Coruña. La Real Sociedad se mantuvo fuerte en lo alto de la clasificación, pero una derrota en la penúltima jornada en Vigo -el Celta luchaba por la Champions- provocó que el Real Madrid tomase el liderato en con solo una jornada por jugar tras vencer en el Calderón por un claro 0-4.
Se llegaban a los últimos 90 minutos de la temporada con el Madrid aventajando al conjunto ‘txuriurdín’ en dos puntos, pero con el gol average particular perdido, por lo que si se hubiera terminado la Liga en empate a puntos, el alirón lo cantaban en Anoeta. Por tanto, ‘solo’ valía la victoria para ganar el campeonato.
Caprichos del destino, el calendario dejó un doble duelo Madrid-País Vasco para el final. Los de Chamartín recibían al Athletic de Bilbao y la Real Sociedad hacía lo propio con Atlético de Madrid –que venía de ser humillado ante los merengues-. La diferencia, que la Real y el Athletic están hermanados y los de la capital… pues eso. Aquel Madrid fue el último que entrenó Vicente del Bosque representando a los blancos y el último de Fernando Hierro con la camiseta del Real Madrid. 
El Madrid comenzó muy fuerte el partido, con la motivación por las nubes una afición entregada. La sinergia fue perfecta y en el minuto 8 Ronaldo conseguía marcar el primer tanto del encuentro tras una gran internada de Roberto Carlos, cuy centro al segundo palo fue capaz de rematar el delantero con un escorzo. Los de Concha Espina se adelantaban y el Bernabéu entraba en ebullición. Virtualmente eran los campeones de Liga.
Era tarde de transistores y todo el mundo estaba pendiente de lo que ocurría en San Sebastián. El momentáneo empate a 0 goles no metía en problemas al Real Madrid, pero sí lo hizo Alkiza. El centrocampista vasco se acercó al borde del área permitido por la pasividad defensiva del líder. Su disparo superó a Hierro por encima, que tapaba la visión de Casillas, y la pelota se coló en las mallas. 1-1. Se volvía al inicio del partido, pero la sensación de encajar el gol llevó el nerviosismo al madridismo y la euforia a Anoeta.
El peso el partido siguió estando del lado del Real Madrid. Obviamente, no podían esperar qué pasaba en el partido y se lanzaron en busca del segundo. Llegó en forma de barril de agua fría para la Real. En la última jugada de la primera parte.
Falta casi sobre la línea del borde del área y Roberto Carlos es una suma que solía dar muy buenos resultados en el haber del Madrid y en aquella ocasión no fue menos. Pasaba ya el reloj el minuto 46 cuando le zurdazo del brasileño no pudo ser detenido por Aranzubía, aun pasándole el balón al lado. Los blancos se iban campeones en la última jugada de la primera parte y el duelo del País Vasco se cerraba en empate a 0 en el mismo tiempo.
En el minuto 51 llegaría un gol que volvía a llevar la tensión a Madrid. Kovacevic adelantaba a la Real Sociedad y los blancos se quedaban a un despiste de perder la liga. Sin embargo, poco tiempo tuvieron desde San Sebastián para presionar al Real Madrid. Un pase entre líneas de ‘Zizou’ dejaba en franca posición a Ronaldo para que, de primeras, cruzara el alón lejos del guardameta vasco y pusiera el 3-1 en el minuto 61 y calmase a los que se mordían las uñas alrededor del mundo.
La última media hora fue de control y de relax, permitiendo al madridismo apagar los transistores y obviar el segundo y tercer tanto de la Real ante el Atlético, que aseguraban la victoria blanquiazul en una temporada espectacular. No obstante, los puntos mandas y en ello ganaba el Madrid. El partido y la Liga.
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