El partido de Copa del Rey entre Hércules y Málaga sirvió también para que las peñas blanquiazules expresaran su disconformidad con el consejo de administración del club por los precios fijados a los abonados para el partido de Liga del próximo sábado entre el Hércules y el Real Madrid.
La mayoría de las peñas, tanto las de los fondos como las que se ubican en preferente, decidieron instalar sus pancartas identificativas al contrario para mostrar su descontento con el trato dispensado por la entidad hacia los seguidores más fieles. La protesta está basada en la escasa diferencia entre el precio fijado en las entradas para el público en general y el que se ha establecido para los abonados.
La suma de la entrada más la parte proporcional del abono da casi el mismo precio que una entrada aislada. De ahí que quisieran expresar lo que consideran un agravio y una falta de consideración por parte del club al abonado. Igualmente, los componentes de la peña Curva Sur desplegaron una leyenda que decía: "Abonado ignorado, oportunista premiado".
Por otra parte, en el palco estuvo la alcaldesa Sonia Castedo junto al máximo accionista del Hércules Enrique Ortiz. La primera edil, que por la mañana estuvo en el juzgado, no dudó en acudir al estadio para presenciar el partido de Copa entre Hércules y Málaga.
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