La Cultural se rió del espíritu del Alcorcón

Cultural Leonesa 0-2 Barcelona





El FC Barcelona inició su trayectoria copera, donde defiende título, con un triunfo plácido por 0-2 ante una Cultural que recuperó, después de más de medio siglo, el sabor de medirse al conjunto catalán, pero que se fue desinflando a medida que transcurría el encuentro.

Si en la temporada pasada el Benidorm, otro Segunda B, les plantó batalla, cediendo tan sólo por sendos resultados por la mínima, en el "Reino de León", Guardiola se permitió la licencia de dar descanso a sus mejores hombres. A tope de revoluciones e intentando tutear a un FC Barcelona un tanto despistado en el inicio, así le tomó el pulso al encuentro una voluntariosa Cultural en la que el ex-jugador del Real Valladolid, Chema, le ponía la intensidad y la garra contagiosa para el resto de compañeros.

UN EQUIPO ENTREGADO

Ficha técnica:

0 - Cultural y Deportiva Leonesa: Saizar; Cerveró, Salva, Pereira, Gorka; Yavhé (Denis, m. 67), Chema Mato, Abel Segovia, Ferrán Tacón (Roskam, m. 67); Chema (Alberto Suárez, m. 67) y Jito.

2 - FC Barcelona: Pinto; Jeffren (Soriano, m. 84), Márquez, Chygrynsky, Maxwell; Keita (Dos Santos, m. 79), Busquets, Yayá Touré; Pedro, Bojan y Gai Assulin (Abidal, m. 56).

Goles: 0-1, Pedro, minuto 40; 0-2, Pedro, minuto 63.

Arbitro: Bernardino González Vázquez (Colegio gallego). Mostró tarjetas amarillas a Jeffren, minuto 30, Alberto Suárez, minuto 85 y Abel Segovia, minuto 89.

Incidencias: Encuentro de ida de los dieciseisavos de final de la Copa del Rey disputado en el estadio "Reino de León" ante unos 12.500 espectadores. En los últimos minutos del encuentro tuvieron que intervenir empleados del club detrás de una de las porterías al provocarse un conato de incendio tras prenderse una bandera.

El partido bajó sus grados, esperando los latigazos de calidad de unos y las ganas sin límite de otros que no le perdían la cara al encuentro y que tampoco pasaban por demasiados apuros porque alguno de los experimentos azulgranas no funcionaba en exceso, caso del canterano Jeffren, que estrenaba posición más retrasada de lo habitual, convertido en improvisado lateral derecho.

Los blancos seguían mordiendo, cómodos en su 4-4-1-1, dejando en punta a su único goleador de la temporada, "Jito-gol", como le ha rebautizado una afición que idolatra al delantero formado en la cantera azulgrana, pero españolista y "perico" de devoción.

En otro chispazo, dentro de la intermitencia del juego catalán, Pedro se sacó un recorte al borde del área y su pase en profundidad dejó a Busquets a los pies de Saizar que tuvo que jugarse el tipo ante el canterano internacional para frustrar la ocasión, aunque el rechace hiciera un extraño que a punto estuvo de colarse en la puerta leonesa.

Jeffren seguía sufriendo, lo que le costaba incluso la tarjeta amarilla, en la antesala de la mejor llegada culturalista en el primer tiempo, con pase atrás desde la línea de fondo de Gorka García a Chema que éste envió desviado, con todo a su favor, al intentar colocar con el interior.

Esperaban los leoneses solventar el primer acto con su puerta inmaculada, pero la habilidad, y también la constancia, de Bojan, dejaba el balón en bandeja a Pedro que desatascaba el marcador con un disparo arriba, imparable para el portero leonés.

SIN FÚTBOL POR NINGÚN LADO

El gol azulgrana pareció dormir el choque, con una Cultural que se mantenía con su dibujo perfectamente definido e inalterable, quizá satisfecha por que su encopetado rival tampoco quisiera hacer excesiva sangre, esperando que alguna de sus triangulaciones acabara encontrando la precisión necesaria para ampliar al renta.

Jito se fabricaba él solo el primer disparo a puerta culturalista y poco después una contra permitía al catalán actuar en esta ocasión de asistente para Ferrán Tacón, pero éste enviaba a las nubes del cielo leonés. En un caracoleo de Jeffen, el venezolano ganaba la espalda a toda la defensa rival, irrumpiendo Pedro para definir a la perfección y colocar el 0-2.

El técnico local Josu Uribe optó por buscar la frescura con un triple cambio pero fue insuficiente para un equipo que dio el partido por perdido antes de que el árbitro diera el comienzo al partido.