El Barcelona se enfrenta a su deseo imposible

Desde aquel 17 de mayo, en la capital francesa, no se han vuelto a ver las caras. Han pasado tres años y, con ellos, ha habido muchos cambios que no evitarán que sea un partido y una noche especial para algunos de sus protagonistas.

Así, el capitán y abanderado de los 'gunners' en París, Thierry Henry, será un rival más para los ingleses si Pep Guardiola decide contar con él. Cierto es que en el Emirates sólo disputó su última temporada, pero el francés es el máximo artillero del Arsenal gracias a su brillante aportación en sus ocho años en el club londinense. A buen seguro que los aficionados le brindarán un homenaje este miércoles.

También se enfrentará a su antiguo club el internacional español Cesc Fàbregas, que dejó la entidad barcelonista en 2003 para probar suerte en Inglaterra. Pese a su juventud, cuenta 22 primaveras, se ha erigido como nuevo capitán y estandarte del Arsenal y se ha ganado un hueco en el corazón de cada 'gunner'. Su participación, a nivel oficial de club, es dudosa por unos golpes en la rodilla, pero todo apunta a que estará en el once inicial de Arsène Wenger.

Sed de revancha, antiguos reencuentros, cuartos de final de una máxima competición europea que el Barcelona defiende y que el Arsenal busca por primera vez y ante su verdugo, son sólo algunos de los alicientes de un partido en el que, si no se tuvieran en cuenta dichas efemérides, tendría un atractivo especial de todas formas.

El fútbol de ataque, un juego asociativo, con rapidez y efectividad a la par y una necesaria estima por mantener la posesión del balón son las características que a los aficionados les hacen pensar en el FC Barcelona, pero también en el Arsenal. Por ello, por enfrentarse dos estilos muy parejos, el Emirates vivirá este miércoles un duelo de fútbol en estado puro.

La baja de Iniesta preocupa a los azulgranas

Habrá que ver si Guardiola o Wenger cambian o perfilan sus estrategias, pero se prevé que no sea así y que la principal batalla sea por tener la posesión del balón. Ambos equipos sufren sin él, al no estar acostumbrados a replegarse atrás y salir a la contra. No es que no tengan jugadores capaces de correr al contraataque, que sí los hay, pero Arsenal y Barça prefieren llegar al área rival tras marear a los contrarios.

Para ello será clave que Fàbregas pueda jugar, ya que además de mover a sus compañeros se está convirtiendo en un segunda punta de mucho peligro, con unas llegadas al área determinantes. En el lado blaugrana, será importante la baja de Andrés Iniesta, con el mismo perfil de Cesc, pero Xavi podría avanzar su posición, por delante de Keita y Busquets o Touré, para conectar mejor con Messi y los hombres de arriba.

Guardiola, además de la citada ausencia de Iniesta, que estará unos 10 días de baja, tendrás las dudas en defensa de Piqué y Abidal, además de la baja de Chygrynskiy por no estar inscrito. En cuanto al central canterano, el lunes no se entrenó con el grupo por unas molestias pero podría llegar a tiempo para jugar, mientras que el lateral zurdo sí entrenó pero todavía no cuenta con el alta médica, y tras muchas semanas parado, podría no entrar todavía en un carril al que Maxwell empieza a adaptarse.