La sanción de 110.000 euros castiga el retraso del cuadro culé a la salida en la segunda mitad, al mismo tiempo que la aparición de bengalas en el sector barcelonista de las gradas. Sin embargo, para el presidente del Barcelona, ambas sanciones están fuera de lugar una por “exagerada” y la otra por “injusta”.
“No creo que sea justo que nos sancionen por unas bengalas que entran en un campo que no es el nuestro. No tenemos ningún poder sobre eso. Si fuera en el Camp Nou, vale. Pero esto es absurdo. Y sobre lo de salir dos minutos más tarde es exageradísimo. A veces un futbolista tiene que ir al baño en el último minuto o pueden pasar mil cosas”, se justificó.
De igual modo, evitó entrar en polémicas con respecto a las sanciones de Mourinho y Vilanova: “Las cosas no son blancas o negras, pero en este momento tenemos que pasar y dedicarnos a nosotros mismos. Tenemos que olvidar el resto de cosas”, finalizó.
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