La polémica, amiga inseparable de Fandel







La asignación del colegiado Herbert Fandel para el trascendental choque de cuartos de final entre España e Italia no está exento de cierta suspicacia. El alemán es un hombre polémico donde los haya, y que no deja contentos ni a propios ni a extraños allí por donde pasa con el pito en mano.

En esta Eurocopa ya ha dirigido los designios del Portugal-Turquía (2-0) y del Holanda-Francia (4-1), tras el que el seleccionador francés explotó en cólera y no se mordió la lengua al asegurar que "el árbitro ha dejado de señalar una pena máxima a manos de Ooijer dentro del área que podía haber invertido el rumbo de los acontecimientos. Fue el único que no vio esta jugada", a lo que añadió con ironía que "siempre hay cosas que se pueden hacer mejor, como concretar nuestras oportunidades o comprarle unas gafas al árbitro". Toda una declaración de intenciones la de Domenech.

Para España no se trata de un colegiado de buen recuerdo, ya que la última vez que dirigió un choque de la selección fue en Belfast ante Irlanda del Norte en partido de clasificación donde los españoles caerían por 3-2 haciendo temblar el puesto de Luis Aragonés.

Escándalos para todos los gustos

No hay que irse muy lejos en el tiempo para recapitular las ampollas que han provocado las actuaciones de Fandel. Sin ir más lejos, esta temporada dirigió el Roma-Real Madrid de los cuartos de final de la Champions, en un partido en sus decisiones caseras facilitaron la victoria 2-1 de los romanos, y tras la que Schuster se destapaba: "del árbitro lo más negativo que se puede decir es que no se merece ser compatriota mío. Ha pitado mal, pero como lo viene haciendo en la Liga alemana, no ha medido por el mismo rasero las infracciones de unos y de otros". Y es que si algo tiene el bueno de Fandel es que consigue sacar de las casillas a todo aquel con que se cruza.

Además, este árbitro fue el protagonista de un partido de clasificación para la Eurocopa entre Dinamarca y Suecia en el que un aficionado saltó al campo para agredir al colegiado cuando el partido iba 3-3 y el alemán señaló un penalti a favor de Suecia expulsando además al sevillista Poulsen. Fandel acabó suspendiendo el partido que la UEFA le daría a Suecia, pero la decisión del alemán no estaría exenta de polémica.

Ferguson le tiene verdadero pánico

Herbert Fandel se ha convertido en el enemigo público número uno del técnico del Manchester United, ya que se las han visto de todos los colores cada vez que al germano le toca arbitrar a los diablos rojos. Ante el Depor en 2001 los ingleses perdieron por 2-3, con dos jugadores expulsados. Dos años más tarde, y ante el Oporto Fandel expulsaba a Keane, en una jugada en la que el ex barcelonista Vítor Baía se tiró al suelo fingiendo una agresión. Ferguson no aguantó más y aseguró que "si los árbitros son ciegos que miren los vídeos".

Pero ahí no acaban las tropelías hacía el Manchester, ya que el año pasado el colegiado alemán volvía a arbitrar el partido ante la Roma de Champions, en el que Scholes era esta vez el expulsado. Ferguson lo tuvo claro: "No sólo jugamos con diez, sino contra doce". Por sus declaraciones el técnico del Manchester tuvo que pagara una multa de 10.000 francos suizos, pero el árbitro alemán se fue de rositas, en un claro gesto de proteccionismo de la UEFA hacia un colegiado que ha demostrado debe estar enchufado por su bajísimo nivel arbitral. Y es que arrastra un currículo digno de un guión de cine por sus continuos escándalos.

Esta misma temporada, Fandel volvía a pitar al Manchester ante el Sporting de Lisboa, y al enterarse de la asignación, Ferguson pidó "un Mogadón" (un fármaco hipnotizante), para poder aguantar el trago.