Argentina no teme a nadie en los JJ.OO.





Que la selección albiceleste llega a los Juegos Olímpicos con un equipazo no se le escapa a nadie. Riquelme, Messi, Gago, Agüero. Así, los propios integrantes de la selección quieren mantener la prudencia, pero se les escapa la confianza con la que llegan a esta cita olímpica. Pablo Zabaleta (Espanyol) y Luciano Monzón (Boca Juniors) parecen no tenerles miedo a sus rivales en el Grupo A de los JJOO, Costa de Marfil, Serbia y Australia, según respondieron hoy a preguntas de Efe dos de ellos,

"En realidad no tengo a nadie presente en especial", aseguró Monzón, que prefiere centrarse en "mejorar en los entrenamientos para poder llegar bien a los partidos y que no me pase ningún delantero".



Zabaleta, que también atendió a los periodistas que asistieron hoy al entrenamiento de Argentina, en el campo de la universidad shanghainesa de Donghua, respondió, con todo, que "son tres equipos difíciles, aunque el primer partido siempre es el que más cuesta".

El primer encuentro lo disputará Argentina el 7 de agosto, un día antes de la inauguración de los Juegos, ante la selección marfileña: "El primer partido, por la ansiedad y por muchas cosas, siempre es el más difícil", reconoció el defensa españolista, "pero es una ronda que va a estar muy pareja (igualada), va a ser difícil y vamos a tener que trabajar bastante para poder empezar con buen pie".

Aún así, los herederos de la selección argentina que se llevó el oro olímpico en Atenas 2004 se ven con posibilidades, ya que "por la calidad de jugadores que hay, es cierto que tenemos la chapa de candidatos", afirmó Zabaleta. Eso sí, precisó que "estamos tranquilos", ya que "sabemos que contamos con muchas individualidades buenas".


Mozón agradece a Riquelme


Por su parte, Monzón explicó a la prensa que "al ser compañeros fuera de la cancha, se genera una gran amistad y un compañerismo dentro del campo, y se sabe que si uno apoya al otro se va a hacer mucho mejor resultado".

También mencionó lo que aporta al equipo la experiencia del veterano Riquelme, que "siempre nos habla de estar tranquilos".

"Él en Boca me ayudó mucho a crecer como futbolista, porque juega mucho con los laterales, y me decía mucho las proyecciones que tengo que tener, en qué momento pasar y en qué momento no, y la verdad es que es una gran ventaja con él, que además de ser un tipo con experiencia, ya ganó casi todo", lo elogió Monzón.

Uno de los principales enemigos de los jugadores es el clima subtropical de Shanghai, que estos días está alcanzando los 35 grados centígrados con un grado de humedad que suele superar día y noche el 70 por ciento.

"Lo que más sufrimos es el calor y la humedad, para entrenar eso agota bastante", señaló Zabaleta. "Ayer el entrenamiento en la mañana (bajo un cielo soleado y despejado, en contraste con la neblina de hoy) fue durísimo, hacía un calor bárbaro, pero bueno, la verdad es que lo estamos llevando bastante bien".