Jesé se merece bastante más

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Ya se sabe que no hay equipo más complicado para estar que el Real Madrid. En el conjunto blanco la competencia es feroz y no es suficiente con ser muy bueno para tener minutos en él. Hay que ser el mejor. Por eso Jesé sabe que no lo va a tener fácil nunca. Así ha sido durante toda su meteórica trayectoria en la cantera merengue. Jesé ha tenido siempre que ganarse el puesto en todos los equipos de las categorías inferiores en los que ha estado, aunque hasta ahora nunca se había topado con jugadores de más nivel que él, pues casi siempre ha estado acostumbrado a ser el futbolista más talentoso de su equipo.

Sin embargo, el extremo ha madurado y ha asentado su cabeza. Su trabajo en el Castilla a las órdenes de Alberto Toril le dio un plus de tranquilidad y estabilidad. En Segunda División se hizo hombre y futbolista y a lo largo de este camino sumó una paternidad que también le ayudó. Así, se acopló perfectamente al primer equipo del Real Madrid y encajó con total normalidad en el grupo, asumiendo desde el principio que su rol inicial era el de un actor secundario. La papeleta que tenía por delante no era sencilla, pero poco a poco fue escalando posiciones en el equipo y se convirtió en diciembre de 2013 yen  enero de 2014 en un hombre básico para el equipo como revulsivo.

Justo cuando mejor estaba llegó su lesión y tuvo que volver a empezar prácticamente de cero. Ancelotti ha llegado a comentar que si él no se hubiera roto la rodilla el Real Madrid quizá hubiera ganado la última Liga. No deja de ser fútbol ficción, pero no niego esa posibilidad. Sin embargo, estas palabras no me encajan demasiado con los planes que ahora el italiano está teniendo en relación al futbolista. Jesé está hoy por hoy fresco, rápido, desequilibrante, pero eso no le está sirviendo de mucho, porque casi no juega. El italiano le regala de vez en cuando 5 ó 10 minutos de partidos prácticamente sentenciados o con poca historia. Sin ir más lejos el propio entrenador no niega que en Elche se equivocó al ponerle sobre el campo para jugar solo 25 segundos, aunque el futbolista ha asumido el error con total humildad y no ha comentado nada públicamente.

Y es que Jesé lo ha hecho muy bien cuando ha tenido oportunidades. Ha marcado dos goles (al Cornellà en Copa y al Sevilla en Liga) y siempre se ha mostrado con 'chispa' en su fútbol. Él siempre ha cumplido con su parte, porque se ha recuperado a la perfección y casi en tiempo récord de su lesión. Pero por una razón o por otra Ancelotti no ha respondido a este esfuerzo y se ha acordado de él menos de lo que a muchos nos gustaría. El italiano tiene claro que la 'BBC' es siempre intocable en condiciones normales, aunque nunca está de más salirse un poco de los esquemas y probar con otras combinaciones. Por simple cuestión de rotaciones y porque Jesé no es un futbolista que precisamente baje el nivel del equipo cuando sustituye a alguno de sus compañeros.Esta temporada el Madrid no anda precisamente sobrado de delanteros y el canario es el jugador más parecido que hay en la plantilla a Bale y Cristiano Ronaldo. Se trata de un futbolista polivalente que puede jugar en prácticamente todas las posiciones de ataque y que asegura siempre un buen rendimiento. Pero sorprendentemente Ancelotti le está dando muy poca 'bola' para la que merece y necesita. Desde su regreso a los terrenos de juego el pasado 2 de diciembre el extremo sólo ha disfrutado de 278 minutos de juego, la mayor parte de ellos en momentos intrascendentes de partidos ya sentenciados. Es una cifra que equivale a poco más de tres partidos y que realmente no tiene ninguna explicación desde el punto de vista del estado de forma del jugador.

Este chico no es un futbolista más. Es uno de esos jugadores que con poco más de veinte años se 'come el mundo a bocados'. Sólo una grave lesión le frenó el año pasado cuando estaba siendo la revelación, no solo del Real Madrid, sino también de la Liga. Como diría Florentino Pérez es de los pocos elegidos que ha nacido para jugar en este club. Y ahora mismo está en nómina y en plantilla, por lo que hay que darse cuenta de que somos unos privilegiados por poder disfrutar de su talento. En ocasiones uno no se da cuenta de lo que tiene hasta que lo pierde, así que hay que intentar con Jesé no suceda esto. Porque él está llamado a triunfar y lo hará aquí o en el club que se lo ponga más fácil. Del Madrid - y de Ancelotti - depende dónde lo acabe haciendo.