Fichaje consensuado entre Portugal y Juande





El entrenador del Real Madrid pidió un informe amplísimo facilitado por Portugal. Estudiado a conciencia, ese informe fue contrastado por el entrenador con varios colegas suyos que siguen la Premier League, donde Juande ha dejado a muchos amigos. Las observaciones eran favorables, por muchos motivos: el jugador puede ser inscrito en la Champions, goza de buena experiencia europea y ha jugado 20 de los 24 partidos que el West Ham ha disputado en la Premier. A Juande también le convenció cómo sube la banda derecha, la explosión que tiene en el arranque y los grandes centros que realiza el francés. Pero sobre todo el no haber disputado la UEFA facilitaba su llegada, mas aún tras la chapuza de Navidades con Lass y Huntelaar.

Sin embargo hay dos notas negativas en la llegada de Julien Faubert. Por un lado, que el Director Deportivo del club no ha tenido nada que ver en su fichaje. Pedja Mijatovic no fue ni consultado por la cúpula del club y las negociaciones las llevó a cabo personalmente Miguel Ángel Portugal. Y otra nota negativa es la cantera. Faubert cierra el paso a un chaval como Miguel Palanca, un jugador comprometido con el club, con los colores y con el escudo. Un chaval que en su debut en el Camp Nou no se arrugó, demostrando un desparpajo digno de Primera División y presentando su candidatura al primer equipo madridista. Pero Juande sabe que Faubert tiene algo de lo que carece Palanca: experiencia internacional. Y eso, a estas alturas de la temporada y con las urgencias blancas, pesa.

Faubert no levantará al Bernabéu, pero desde arriba se espera y se desea que pueda ser un hombre que ayude al equipo aportando velocidad por la banda. En los 20 partidos que ha jugado con el West Ham ha demostrado estar a un grandísimo nivel físico y a un gran escalón táctico. Dotes tiene, muchas, y facultades también. Si bien es verdad que no podrá optar a ser el próximo ganador del FIFA World Player, es alguien con las características que pedía Juande y el vestuario le acogerá con los brazos abiertos. Bienvenue à Madrid, Julien!