Para mí, y aunque ahora seguro que sonará ventajista, Sergio Ramos siempre ha sido un central 10 y un lateral 7. En la banda se le veía perdido en muchas ocasiones. Eso sí, en el pasado Mundial de Sudáfrica fue, de largo, el mejor lateral diestro del campeonato. Sin embargo, creo que su rendimiento en el centro de la defensa está siendo sublime. De hecho, bajo mi punto de vista, Sergio Ramos está entre los tres mejores centrales del mundo ahora mismo sin ningún tipo de discusión. Centrar su posición le ha permitido asentarse en el campo y ganar en confianza, tanto en la propia como en la de la grada. De hecho, se ha llevado muchos más aplausos desde que juega en el centro. La gente se ha dado cuenta que esta nueva versión de Ramos es la que quiere ver domingo tras domingo. También Mourinho, que no le ha movido del centro a pesar de tener que colocar parches en la derecha como Lass o Altintop.
Volviendo a esas palabras del 2008 en esta casa, es posible que ahora Sergio se divierta menos, pero esa seriedad le hace ganar en madurez y en presencia sobre el campo. Es mejor intervenir poco pero bien, que muchas y mal. También es verdad que algunos de sus peores momentos como lateral le llegaron mientras tuvo que infiltrarse, lo que le hizo bajar el rendimiento de forma lógica. Siempre dio la cara por el Real Madrid, aunque se la partieran. Ahora está en el mejor momento desde que llegó a la capital. Físicamente a tope, reforzado como segundo capitán del equipo y en la posición que le hará grande. Curiosamente la misma que da nombre a este periódico: defensa central.
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