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El caso más flagrante tuvo lugar en la pasada final del Mundial de Sudáfrica, cuando Webb permitió la violencia que empleó la selección de Holanda para frentar al combinado español. El principal perjudicado fue el madridista Xabi Alonso, quien sufrió una brutal patada en el pecho de De Jong sin que su rival viera la merecida roja. Y es que Howard Webb es un hombre al que no le gusta arriesgar y que la mayoría de las veces prefiere no complicarse la vida a pesar de que las jugadas sean muy claras y merezcan ser pitadas.
Además, el inglés últimamente está siendo un habitual de los partidos del Real Madrid, pues desde 2012 ya ha dirigido tres partidos, lo que hace un total de cinco. En ellos el balance merengue es de dos victorias, dos empates y una derrota. Curiosamente el equipo blanco no ha logrado vencer con él a domicilio y de estos cinco choques, en dos de ellos (ante el Borussia la temporada pasada y el Bayern en la 2011/12) el Madrid se enfrentó a equipos alemanes. Entre sus errores más recientes que han perjudicado al Madrid está el cometido en abril pasado, cuando en la vuelta de las semifinales de Champions se negó a señalar dos claros penaltis a favor de los merengues. Razones de sobra como para andarse con cuidado el próximo miércoles en un territorio siempre hostil como el alemán.
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