"Convertiremos nuestro estadio en un infierno para el Madrid. Cumpliremos con lo que nos ha pedido Rummenigge. Creo que estaremos en la final de Lisboa, pero de lo que estoy seguro es que pondremos tanto corazón y voluntad el martes ante el Madrid, que nadie podrá decirnos que no lo dimos todo", aseguró , en declaraciones a 'Bild' el jugador holandés con ese aire de chulería y prepotencia que caracteriza a los integrantes del equipo alemán.
Robben se hace el conocedor del Real Madrid por los años que pasó vistiendo la elástica merengue. No tengo cuentas pendientes allí porque fueron dos años muy bonitos, pero conozco su obsesión por la 'Décima' y lo grande que es para ellos ganarla", aseguró.
Estas declaraciones están en la línea de las que hizo una vez terminado el partido de ida cuando pese a la derrota cosechada en el Santiago Bernabéu, declaró que esperaba más del Real Madrid y mostró su alegría por haber ganado la posesión al conjunto de Carlo Ancelotti. Lo cierto es que el Bayern necesitará marcar, al menos, dos goles para eliminar al equipo blanco y eso siempre que Cristiano, Bale, Benzema y compañía se queden sin marcar en Alemania.
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