Sami Khedira está más cerca de marcharse que Di María, a pesar de que el argentino en los últimos tiempos ha sido el hombre más nombrado en los medios de comunicación como posible venta. El Real Madrid no quiere oír hablar de la salida del Fideo, que tiene contrato y una cláusula de 200 millones de euros. Ancelotti cuenta con él y con Khedira, pero el caso del alemán es distinto.
El Real Madrid sabe que si Sami Khedira no renueva su contrato antes de diciembre, a partir de enero podrá escuchar ofertas para marcharse gratis en el verano de 2015. El club pretende evitarlo, de manera que si el alemán sigue sin renovar su contrato ante las ofertas madridistas, será el hombre sacrificado por el Real Madrid. Especialmente ahora que el club se ha reforzado con Kroos para la línea medular.
En el caso de Di María, el PSG es el principal candidato a su fichaje, sobre todo si Lavezzi se marcha al Chelsea. Sin embargo, el club francés tendrá que poner sobre la mesa 60 millones de euros como mínimo, arriesgándose a cabrear a la UEFA por no respetar el fair play financiero. Antes que comprar, los franceses deberán vender si quieren optar al fichaje del Fideo.
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