Cristiano Ronaldo y Benzema fueron los leones

Después de haber encontrado la velocidad de crucero, la visita del Athletic de Bilbao al Bernabéu pintaba como una gran ocasión para que el Real Madrid siguiera con su buena racha. La inercia de los blancos era claramente ascendente, todo lo contrario que la de su rival. Por si esto fuera poco, apenas pasaron dos minutos antes de que el luminoso cambiara. 120 segundos fue el tiempo que necesitó Cristiano Ronaldo en marcar el 1-0. El tanto llegó después de una internada de Carvajal por la derecha y un centro final al área de Bale que Cristiano cabeceó al fondo de la red de la meta vasca. La peor medicina para un equipo ‘enfermo’ como el Athletic era que le marcaran pronto. El Real Madrid lo sabía y acertó con la dosis.

Con el marcador a favor, el Real Madrid dominó a placer. Valverde comenzó adelantando a su equipo en la presión y ubicación de sus hombres, pero después de que Modric y Kroos rompieran en un par de ocasiones consecutivas el bloque del Athletic, el técnico visitante pidió retrasar unos metros a su equipo. Seguramente el tufillo a goleada empezó a apoderarse de su cuerpo.

Cristiano Ronaldo y Benzema estuvieron cerca de marcar el segundo en dos aproximaciones merengues a la meta visitante. Cristiano con un tiro desde dentro del área bien tapado por Gorka tras un rechace de la defensa, mientras que Karim estuvo a un pelo de empujar un envío desde la banda derecha que estaba pidiendo ser tocado para encontrarse con la red.

Como el segundo tanto del partido para los blancos iba a llegar antes o después parecía que sólo hacía falta conocer el autor y la forma. Y fue Benzema, a la salida de un córner, el que marcaba de cabeza el 2-0. El francés marcaba por segundo partido consecutivo, tras haber sido el héroe merengue en la visita al Ludogorets. Al descanso, las sensaciones de unos y otros eran todavía más explícitas que el propio marcador. Ni un milagro parecía salvar al Athletic de una derrota segura en el Santiago Bernabéu.

La segunda parte iba a aumentar todavía más las diferencias entre uno y otro equipo. Un Real Madrid desatado, dinámico y con ganas de agradar ante un Athletic que se veía impotente porque no conseguía robarle la pelota al equipo de Ancelotti. Con estas premisas, los goles fueron cayendo sobre la portería del equipo vasco hasta completar un escandaloso 5-0 para el conjunto merengue.

No habían pasado ni 10 minutos del segundo acto y Cristiano Ronaldo ya estaba celebrando su doblete. Gareth Bale volvió a tomar el papel de asistente y CR7 el de ‘matador’. Si no lo estaba ya, el 3-0 fue la guillotina perfecta para matar el mejor partido del Real Madrid en lo que va de temporada 2014-15. Por si esto fuera poco, también Casillas tuvo una gran intervención en un remate de Ibai de cabeza en el segundo palo. La noche empezaba a ser redonda.

Como Cristiano Ronaldo, Benzema y Bale parecían empeñados en adelantar los regalos de Navidad, en el 4-0 fue el portugués el que dio la asistencia para que Benzema rematara a puerta el cuarto de la noche. Y es que la ‘BBC’ dio un recital de asociación y coordinación. El Athletic no olía la pelota y el Real Madrid se divertía con su gente.

Por último, sólo faltaba que Cristiano Ronaldo rematara la noche con la consecución de un nuevo hat trick. Esta vez lo marcó sin querer, de rebote, después de un toque de Pepe dentro del área, el balón golpeó en el propio Cristiano y se acabó colando en el fondo de la red para firmar el 5-0 definitivo que, de no haber sido por Iraizoz y sus grandes paradas a Cristiano o Bale, podría haber terminado en resultado de otro planeta. El Real Madrid vuela, Benzema cabalga y Cristiano Ronaldo no para de marcar. Esto marcha.