Al parecer, el principal punto de discordia entre ambas partes estaría en que el futbolista no vería proporcional la nueva claúsula con el salario que le ofrece la entidad que preside Amadeo Salvo. La citada emisora desvela que el nuevo sueldo de Gayá sería de un millón de euros neto por temporada, durante cinco años de contrato, mientras que la claúsula ascendería hasta los 50 millones de euros.
Al futbolista no le habría sentado bien esta desproporción en las cifras y, de ahí, la decisión del Valencia de esperar al verano para retomar las conversaciones. Mientras tanto, la claúsula de Gayá sigue siendo de 18 millones de euros, una cifra a la que equipos como el Real Madrid o el Manchester City estarían dispuestos a llegar.
La citada información cuenta que el equipo de la ciudad del Turia tomó esta decisión el pasado 8 de abril, tras dar un ultimátum a los agentes a principios de Semana Santa. Lo cierto es que este 'frenazo' en las negociaciones puede ser beneficioso para los intereses madridistas.
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