Los jugadores merengues se dieron la mayor 'paliza' liguera de la temporada en el Levante-Real Madrid. Los datos demuestran que en el último partido recorrieron más kilómetros que en cualquiera de los 25 partidos anteriores que han disputado esta competición. Y eso se acabó notando en las piernas de algunos de los jugadores. El ejemplo más claro fue Toni Kroos, pues el alemán se tiró agotado sobre el césped al terminar el duelo. No estaba lesionado ni tenía molestias. Simplemente necesitaba coger algo de aire porque estaba realmente agotado.
La condición física del teutón no es la mejor. Ha acumulado muchos minutos y ha realizado un esfuerzo para el que no está muy acostumbrado. Él siempre fue mediapunta y ahora su obligación es sostener al equipo como primer mediocentro. Su estancia en el Real Madrid se resume en un 'sube y baja' constante por el campo, por lo que su desgaste es notorio. De ahí que Zidane tenga claro que este sábado ante el Celta el jugador tendrá que descansar. El duelo que importa de verdad se jugará solo tres días después ante la Roma, por lo que Kroos tendrá su merecido descanso en Liga y en su lugar Casemiro podría llevar la 'manija' de la medular.
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