Después de faltarle el respeto al Espanyol tras el partido de Copa del Rey al asegurar que todo el mundo sabía que “el Espanyol era de Cornellá y no de Barcelona”, hoy el defensa catalán ha continuado con su cruzada antiperica realizando un gesto obsceno, lamentable, vergonzoso y que demuestra bien a las claras los grandes ‘valors’ que enseñan en La Masía del Barça.
Corría el minuto 84’ de encuentro cuando Piqué mandada a la red un cabezazo que suponía el empate a uno en el marcador. Sin cortarse ni un pelo, demostrando una mala educación a prueba de ‘bombas’, Piqué ha sacado la manita a pasear, ha hecho el gesto de los ‘cuernos’ y se ha llevado el dedo índice a la boca pidiendo silencio a los españolistas.
Desde la Real Federación Española de Fútbol y desde la Liga llevan vendiéndonos la ‘milonga’ que la violencia en el fútbol solamente se genera desde la grada. Pero, ya va siendo hora que desde los distintos estamentos que rigen nuestro fútbol se tomen medidas contra jugadores que incitan al odio y a la violencia como Gerard Piqué ¿Hasta cuándo va a poder seguir campando a sus anchas?
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