Desde hace ya varias semanas, en el PSG sólo hay una obsesión, el partido de este martes contra el Real Madrid. Es lógico, deben remontar un 3-1 en contra y sin su mejor jugador por lesión, además el hecho de volver a caer en octavos con una inversión como la que han hecho les obliga a dejarse todo en el campo.
Lo harán seguro y el Madrid lo sabe, como también sabe que el Parque de los Príncipes será una caldera antes, durante y habrá que ver si también tras el partido. Para eso se están encargando varios colectivos ultra del propio PSG, que cuentan con total impunidad y apoyo por parte del club y que preparan algo para el choque. Seguro que habrá bengalas, humo, un ambiente caldeado y pancartas ofensivas como la que se pudo ver en el último partido de los de Emery ante el Troyes donde se podía leer entro otras lindezas: "Puta Madrid".
Originalidad al poder sin duda y lo cierto es que en el club blanco no existe preocupación pero sí precaución. El dispositivo de seguridad que rodee al equipo será numeroso y es que pese a que no tiene porque ocurrir nada, más vale prevenir que curar. El partido no sólo se jugará en el campo, también en las gradas y estos individuos darán todo para que sea una de las peores experiencias del Madrid en Paris. No es nada nuevo para estos jugadores, jugar en ambientes hostiles, les motiva y saben que en cuanto hagan un gol, esos gritos y ese humo se disipará.
El PSG busca meter presión al colegiado
Hasta ahora ya habíamos oído a Unai Emery y a Nasser Al-Khelaifi quejarse explícitamente por la actuación del árbitro en el partido del Santiago Bernabéu. Pues bien, todavía nos faltaba escuchar al Director Deportivo del PSG, Antero Henrique. Aprovechando la proximidad del partido ante los blancos el diario francés 'L'Equipe' le ha entrevistado y este no ha dudado en mandarle un mensaje envenenado al trencilla, intentando condicionar su actuación a su favor.
Y es que, al ser preguntado por lo ocurrido en Madrid, el dirigente ha explicado que "no fue un partido de jugadores contra jugadores, hubo influencias del exterior. Y no quiero seguir hablando de ello porque tampoco quiero que se tome como una excusa. Pero todo el mundo lo sintió así, porque para mí fue como una falta de respeto para París y para Francia" indicó.
Pero en lugar de dejar el tema se fue 'calentando' y continuó avanzando en soflama: "de hecho no es solo lo de ese partido, la temporada pasada nos ocurrió lo mismo. ¿Por qué ocurre esto? Nos arbitró un coleagiado de 44 años, sin experiencia (sobre Rocchi), y antes del partido se decía que era el partido más importante de la temporada, así que si es así necesitamos a uno de los mejores colegiados. Queremos tener a uno que sea de nivel excepcional. Es justo lo que pedimos". Lo que no queda claro es a qué llama el PSG árbitro "de nivel excepcional". Quizá uno que pite lo que les guste y convenga...
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