El francés viene de vivir una temporada de lo más extraña. Sus números han sido muy pobres. Antes se le achacaba por no acercarse a la cifra de goles que metía Cristiano Ronaldo. Una vez se vio que ese reto era prácticamente inaccesible, la afición empezó a “conformarse” con 20-25 goles por temporada. Cifra habitual de Karim.
El problema es que los números este año han sido más bajos aún. El francés ha marcado 11 goles en 44 partidos. Estadísticas que no van acorde a la calidad de un jugador como Benzema. El francés hila fino cuando tiene el balón en los pies, hace mejor a los demás y asiste, pero al final lleva el nueve a la espalda y es de notoria obligación exigirlo más.
Por su parte, el Real Madrid le cierra la puerta al argelino. No quiere que se vaya. Aunque parecía que con la salida de sus dos máximos defensores (Cristiano Ronaldo y Zidane) todo apuntaba a una salida, la situación no es tal y en el club se cree que Lopetegui puede recuperarlo. De todas formas, si surge una negociación, el precio de salida o al que estaría dispuesto el Madrid a recibir por soltar al jugador son 50-60 millones de euros.
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