La diferencias entre el señorío y los 'valors' a la hora de fichar

Mientras el Madrid acaba bien con los clubes vendedores, al Barcelona ya le han cogido asco por media Europa.


Señorío VS valors a la hora de fichar

Señorío VS valors a la hora de fichar




No hace falta irse muy lejos para ver el asco que le han cogido al Barcelona en lugares como Dortmund, Liverpool o Roma. Son tres ejemplos muy recientes de la nefasta gestión culé, basada en dar palos de ciego y tratar de arrasar allá por donde pasa.

Conviene recordar las formas con las que los culés han fichado recientemente a Dembelé, Coutinho y ahora también a Malcom. El primero salió del Dortmund por la puerta de atrás, después de declararse en rebeldía y con la enemistad de todo el vestuario. Dejó 130 millones de euros en las arcas alemanas y se ganó el desprecio de compañeros y aficionados.

Con Coutinho buscaron hacer algo parecido el pasado verano, sin embargo, el Liverpool se cerró en banda y no traspasó al jugador hasta el mercado de invierno. Le sacaron 150 ‘kilos’ ante la insistencia cansina de un Barcelona que torpedeó de todas las maneras el entorno inglés. Al final, para no desestabilizar con tanto rumor a la plantilla optaron por venderle…y llegaron a la final de la Champions sin él.

El ejemplo más reciente de los ‘valors’ culés lo tenemos en el fichaje de Malcom, actuando por detrás de forma miserable cuando la Roma ya tenía el acuerdo hecho tanto con el jugador como con su club, el Burdeos. Ahí no hubo ‘seny’ ni ‘humildat’, pasaron de los italianos, puentearon su acuerdo y se lo quitaron de la forma más sucia que se recuerda ¡Cuánto duele el 3-0 del pasado curso en Champions con el que les echaron de Europa!


El Real Madrid, por su parte, es todo lo contrario al Barcelona. Preguntó por Odriozola y llegó a un acuerdo con su club, la Real Sociedad, para no tener que pagar la cláusula de rescisión, un gesto que siempre se considera algo agresivo con el equipo contrario (cosa que el Barça ha hecho con Lenglet este verano, metiéndosela doblada al Sevilla, por cierto).

Pero hay más. Este mismo verano el Madrid ha salido a desmentir informaciones de los medios de comunicación respecto a los posibles fichajes de Neymar y Mbappé. Cuando se han dado por hechos los contactos y los acuerdos con los jugadores del equipo francés, el club blanco ha comunicado oficialmente a través de su web que esas noticias eran falsas. El respeto al juego limpio es máximo en el Bernabéu y el PSG es un club amigo con el que siempre hubo grandes relaciones. Nada de clavar el puñal por detrás como hacen otros.

Estas son algunas de las diferencias en el arte de fichar que hay entre el mejor club de la historia y un segundón de la vida que necesita hacerse notar. Luego, todavía hay quién se pregunta en el nordeste de la península, en esa burbuja pro-culé en la que viven anclados, que por qué el Madrid es tan respetado en el mundo, ¿hace falta poner más ejemplos?