Así desbloqueó el Real Madrid el fichaje de Thibaut Courtois

Mateo Kovacic, decisivo en la operación que llevará al portero belga al Santiago Bernabéu.


Courtois, Kovacic, montaje

Courtois y Kovacic




No ha sido el fichaje de Kepa lo que ha provocado que el Chelsea haya decidido aceptar la oferta del Real Madrid por Courtois. La intención de los blues era dar largas al club blanco hasta que finalizara el mercado en la Premier League, este jueves, y mantener al belga contra su voluntad el año que le queda para intentar forzarle a renovar su contrato más adelante. Esto es lo que deslizan desde Concha Espina, desvelando que Mateo Kovacic fue clave para darle la vuelta a la tortilla.

El plan del Real Madrid no se estaba desarrollando según lo previsto hasta el momento en el que Courtois demostró, al no presentarse a los entrenamientos del Chelsea, que no está dispuesto a tragar. El belga no renovará de ninguna manera, quiere volver a España para estar más tiempo con sus hijos y si tiene que pasarse un año en el banquillo lo hará. Pero no era la situación más deseable para un Real Madrid que ya vivió una situación similar en el pasado con el UnitedDe Gea.

Al mismo tiempo, Mateo Kovacic desveló su intención de no volver a entrenar con el club blanco si no le permitían cumplir su deseo de marcharse. Así, en la cabeza de los jefes del Real Madrid se encendió una bombilla: quizá ofreciendo al croata al Chelsea podría desbloquearse la operación Courtois. Dicho y hecho. El club londinense aceptó el traspaso del belga a cambio de unos 35 millones y la cesión del centrocampista. Fue ahí cuando rápidamente se puso en marcha el fichaje de Kepa por el Chelsea, pagando directamente su cláusula para no perder ni un segundo en negociaciones (el cierre del mercado se acerca en Inglaterra).

Sólo falta que esta serie de operaciones desencadenadas a conciencia por el Real Madrid se consumen mediante el correspondiente anuncio oficial. Kovacic y Kepa al Chelsea y Courtois al Bernabéu. Tres movimientos que guardan una relación directa y que suponen una nueva jugada maestra del club blanco para resolver de una tacada dos problemas. Ahora surge uno nuevo: buscarle sustituto a Mateo.