El club ha estado muy pendiente de los dos partidos amistosos que ha jugado Vinicius con la Sub-20 de Brasil durante el parón por las selecciones. El chico lo dio todo, especialmente en el primer partido, en el que sólo pudieron frenarle a base de faltas y agarrones. Sin embargo, en el segundo de los encuentros la cosa pasó a mayores y todo terminó en una tangana en la que Vinicius se vio envuelto por exagerar una falta.
Este tipo de cosas son las que quieren trabajar de forma especial con Vinicius en el Real Madrid. Una fuente, muy próxima al equipo de trabajo de Solari, nos asegura que el jugador debe estar “preparado cuanto antes” para que le hagan “todo tipo de faltas, agarrones…e incluso provocaciones” pero que lo más importante es que “él no caiga en ese juego porque si lo hace pierde toda su influencia en el partido y el rival le termina sacando del mismo”.
En el Bernabéu son conscientes de que un jugador con las habilidades de Vinicius va a recibir muchas patadas. Los rivales van a intentar limitar su fútbol a base de juego brusco, muchas veces por encima del límite del reglamento, y ahí el joven brasileño debe templar los nervios, aguantar las pulsaciones y no caer en provocaciones porque cualquier día “le pueden terminar expulsando a él después de haber recibido 8 ó 10 faltas”, nos dice esta misma fuente.
Vinicius tiene madera de crack. Lo saben en el Real Madrid…y lo saben los contrarios. Por eso, casi tan importante para él va a ser poner un balón en la escuadra como saber serenarse y aguantar todo tipo de provocaciones, patadas o agarrones del rival. Solari tiene la intención de recordárselo en las próximas fechas porque sabe que parte del aprendizaje que aún le queda a ‘Vini’ no es con balón, también saber moverse cuando la cosa se pone fea y no terminar siendo el ‘malo’ es parte de este mundo del fútbol y al brasileño aún le quedan muchas provocaciones que soportar.
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