De laurentiis, presidente del club italiano, ha ofrecido a Fabián una mejora de sueldo como contraprestación a su gran servicio y a su importancia para la entidad siciliana, pero detrás de esa subida de salario se esconde una considerable cláusula de rescisión detrás de 120 millones de euros. Así el presidente entiende que ambos salen ganando, el jugador con un salario acorde a su nivel (actualmente percibe 2 millones), y el club garantizándose que Fabián permanezca o que al menos si sale, que lo haga por un precio de récord.
El jugador tiene contrato en vigor hasta el 2023, por lo que las prisas no son excesivas para ambas partes y habrá tiempo para encontrar un acuerdo, sin embargo si Fabián decide no renovar ante la espera de fichar por un club como el Real Madrid por ejemplo, las cosas no serían sencillas para el mediocentro, porque ya sabemos como se las gasta el equipo italiano, que es un duro hueso de roer para vender a sus jugadores. La mejor prueba es que sus mejores jugadores no se venden, así lo demuestran los casos de Insigne, Koulibaly, o Mertens, que tras grandes ofertas siguen en el Nápoles, o si venden es por grandes ofertas como la de la Juventus por Higuaín de 90 millones… una locura.
Así todo hace indicar que si finalmente el campeón y MVP de la pasada Eurocopa sub21 renueva con su club, cualquier equipo lo tendrá muy difícil para sacar al jugador de donde está. Y el Real Madrid que ha sido uno de los grandes interesados tendrá dos opciones, o bien forzar tanto al club como al jugador para una venta más o menos amistosa, o ante la dificultad que entrañaría su fichaje, pensar en otras opciones para reforzar el medio del campo.
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