Según ha podido saber Defensa Central, el entrenador es consciente de que hay cosas que no se están haciendo bien, pero prefiere que la prensa le atice a él, hablando incluso de cambio de entrenador, críticas y otras circunstancias antes de que se focalicen los ‘palos’ en los jugadores y la plantilla porque eso puede afectar aún más al grupo antes de partidos como el de este martes en Turquía.
Zidane se ha podido notar afectado este lunes en los entrenamientos, su cara de preocupación ha sobresalido. Las críticas son las principales protagonistas de la vida de Zizou, y eso no es cómodo para cualquier ser humano decente. La directiva intenta tapar de la mejor forma posible los problemas que se están viviendo en el vínculo interno del club, pero no hay manera.
Lo único que pide Zidane, es protección hacia sus jugadores, que no se puedan sentir ofendidos por la mala situación. El técnico francés desea lo mejor para el Real Madrid, y si finalmente su decisión es dimitir, no quiere que la plantilla se vea afectada. Se iría cordialmente como ya lo hizo en junio de 2018.
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