El 'crack' francés lleva muchos años en la órbita del conjunto blanco.
Kylian Mbappé es una de las grandes estrellas del panorama futbolístico. El jugador del PSG acumula una larga lista de pretendientes (Real Madrid, Barcelona, Juventus, Manchester City) pero no le tiembla el pulso. Con apenas 20 años suma 88 goles y 37 asistencias en 142 partidos oficiales y fue mucho antes de acercarse a estas cifras cuando su nombre ya sonó por los pasillos del Santiago Bernabéu. En la victoria del Mónaco del 2016 (1-2) ante el Montpellier el conjunto blanco volvió a activar su interés por él tras cuajar un partidazo que copó la mayoría de portadas del mundo.
El delantero realizó una auténtica exhibición que llamó la atención de la cúpula madridista. Marcó un gol, pero sobre todo dejó el sello de identidad que hoy le acompaña en el césped. Ese desborde y velocidad que tienen muy pocos futbolistas en el planeta sorprendió y mucho en
Real Madrid. Los blancos ya estuvieron a punto de ficharle cuando apenas era un niño, pero su familia no quería que saliera de
Francia tan joven. De hecho, llegó a visitar
Valdebebas y conoció a algunos de sus ídolos como
Cristiano Ronaldo y
Zinedine Zidane. Pero fue en
Montpellier (2016) cuando se reactivó el interés por él y se empezaron a tener las primeras conversaciones con el conjunto monegasco.
(Las 3 mayores virtudes de Mbappé que vuelven loco al Real Madrid).
Su fama dio un vuelco radical en la victoria del
Mónaco (5-3) ante el
Manchester City. El francés ya avisaba de su grandeza y alertó a los ojeadores que se encontraban en el estadio. Ese jugador tenía un talento especial, pero no era ninguna sorpresa para el
Real Madrid. Entonces los blancos ya habían contactado directamente con
Dmitri Rybolóvlev para tantear las opciones de mercado. Pedía más de 100 millones de euros por un jugador que tan solo tenía 18 años y avisó al conjunto blanco de que el
PSG estaba haciendo todo lo posible para convencer a la familia de que no se marchase de
Francia. Además, el conjunto monegasco reconoció que iban a venderlo porque necesitaban dinero tras la potente inversión económica que se realizó por esa época fichando a jugadores como
(Falcao, James Rodríguez, Moutinho o Bernardo Silva).
Ha pasado el tiempo pero no las intenciones del
Real Madrid por fichar al delantero francés. En el
Santiago Bernabéu están convencidos de que va a ser el futbolista de la próxima década y no lo pueden dejar escapar. Varios clubes como el
Barcelona, la
Juventus o el
Manchester City quieren asegurarse la hegemonía en
Europa con su traspaso, pero las intenciones de
Mbappé solo pasan por jugar en el conjunto blanco. Es su sueño de la infancia y, aunque no pudo firmar en 2017 por consejo de su familia, no rechazará la próxima oferta que le garantice nuevos retos y convertirse en el buque insignia del nuevo Madrid.
DEJA TU COMENTARIO