El brasileño no cuajó ni mucho menos su mejor partido y tuvo que ser sustituido por Ferland Mendy.
El Real Madrid hizo los deberes en la apertura del Santiago Bernabéu en este 2020. Recibían a un rival siempre complicado, el Sevilla de Lopetegui, quién al final del encuentro se excusó más en la actuación arbitral que en los fallos que tuvieron durante los noventa minutos. De hecho, para ser realmente justos, el conjunto hispalense debió marcharse del feudo blanco sin ni un solo gol a favor (el VAR tuvo que anular el tanto de De Jong por mano previa de Munir). La banda de Marcelo fue la principal fuente de ocasiones de ataque de los sevillistas y, cuando Casemiro marcó el 2-1, Zidane decidió dar entrada a Mendy.
El brasileño no cuajó su mejor actuación el día que precisamente cumplía 350 partidos en
LaLiga con la camiseta del
Real Madrid. Perdió la posición en varias ocasiones y tampoco estuvo especialmente activo dónde suele serlo, en ataque. En la segunda mitad el
Sevilla encontró en su banda el mejor lugar para generar peligro y por ello, cuando
Casemiro puso por delante a los de
Zidane en el marcador, el técnico galo le sustituyó por
Mendy. Esta situación el propio
Marcelo conocía que podía darse, ya que
'Zizou' le avisó en el descanso.
(Casemiro fue el '9' de invierno y salvador del Real Madrid).Resulta evidente que el lateral francés desempeña una mejor labor defensiva que
Marcelo. Con el ex del
Lyon en el campo, el
Real Madrid no ha recibido ni un solo gol en 514 minutos. Precisamente para ejercer este rol llegó al
Santiago Bernabéu el pasado mercado estival.
Zidane le conocía perfectamente (sigue la
Liga de su país) y pidió al club su fichaje tras aceptar la cesión de
Reguilón. El técnico confiaba en que, con
Mendy en los últimos minutos, el
Sevilla tendría más dificultades para llevarse el empate.
No obstante, en
Defensa Central podemos asegurar que las informaciones que se están publicando en varios medios y redes sociales sobre una gran pitada del
Bernabéu al brasileño cuando fue sustituido, son totalmente falsos. Los aplausos pesaron mucho más y el jugador se retiró devolviendo la ovación. No hay debate en el
Real Madrid.
Mendy y
Marcelo son dos grandes efectivos para
Zidane que serán necesarios a lo largo de la temporada para conseguir los objetivos marcados.
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