La presente edición de la Champions League no se lo está poniendo fácil al Real Madrid en su intento de llegar hasta la final de Wembley. Los pupilos de Carlo Ancelotti quieren estar el 1 de junio en el estadio inglés disputándose la Decimoquinta, pero antes de comprar los billetes para Inglaterra hay que vencer al Bayern de Múnich en las semifinales.
El sorteo del cuadro antes de los cuartos de final ha colocado en el camino de ambos equipos un doble Clásico europeo. Este enfrentamiento, a pesar de ser el más celebrado en la élite futbolística, no tenía lugar en la máxima competición continental desde la temporada 17/18: aquella campaña europea concluyó con la Decimotercera ingresando a las vitrinas del Santiago Bernabéu.
Después de tantos años, la noticia ha sido bien recibida en Alemania. La reacción de la cuenta oficial en X del cuadro bávaro lo dice todo: estamos ante el mayor espectáculo que pueden ofrecer las dos mejores cancillerías futbolísticas del planeta. “Nos encontramos otra vez”, confirman desde la capital bávara adjuntando un montaje con los futbolistas más representativos de ambos equipos.
Preparación en marcha
La imagen representa a Vinícius y Harry Kane, argumentos en ataque de Carlo Ancelotti y Thomas Tuchel respectivamente, coronados por grandes imágenes de Jude Bellingham y Jamal Musiala. La elección de ambos futbolistas no es casualidad: además de ser líderes de vestuario y proyecto deportivo, entre ambos centrocampistas hay un importante vínculo de amistad que se ha fortalecido con los años.
De fondo en ambas imágenes se puede adivinar la silueta del nuevo Santiago Bernabéu y las gradas vacías del Allianz Arena. Toda Europa fija la vista en Múnich, lugar donde el próximo 30 de abril se disputará el partido de ida de semifinales. Tan solo una semana después, el miércoles 8 de mayo, ambos equipos concluirán la eliminatoria en el feudo blanco para saber quién tendrá una plaza en el estadio de Wembley.
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