En las oficinas del Bernabéu no se para. Es tal el ritmo de trabajo al que tiene acostumbrado Florentino Pérez a sus subordinados que no hay tiempo para el descanso o la relajación. Así, mientras el primer equipo dio este domingo un paso de gigante en la consecución del título de Liga y se encuentra en semifinales de la Liga de Campeones, en la dirección ejecutiva del club se sigue planificando la próxima campaña con la meta de reforzar, más si cabe, la plantilla que tiene a su disposición Carlo Ancelotti.
Así, ante la inminente llegada de Kylian Mbappé, el equipo también se prepara para afrontar determinadas bajas, entre ellas, la de Luka Modric. El croata, que el próximo mes de septiembre cumplirá 39 años, acaba contrato con el Real Madrid este mes de junio y, según parece, no va a haber prolongación de su vínculo contractual con la entidad de Concha Espina. En la misma línea se encuentra Toni Kroos, aunque con el alemán hay más opciones de alargar su contrato, al menos, una temporada más.
El centro del campo que tendría Ancelotti a su disposición pasaría, pues, por Aurélien Tchouameni, Eduardo Camavinga, Fede Valverde y Jude Bellingham. Sin embargo, según José Félix Díaz, periodista del diario ‘Marca’, la intención del club es la de contratar a un centrocampista con un perfil “más creativo”, destacando en este aspecto Florian Wirtz, la estrella del Bayer Leverkusen de Xabi Alonso que acaba de ganar la Bundesliga en Alemania.
El centrocampista germano, que tiene contrato con su equipo hasta 2027, es además uno de los futbolistas con más proyección de la Selección de Alemania. Su gran temporada le confirma como uno de los jugadores más cotizados y en el Leverkusen saben que, tarde o temprano, habrá que ponerle un precio para que Wirtz destaque aún más en un equipo de mayor nivel.
En el Madrid, no obstante, son prudentes y prefieren esperar al verano de 2025. Entonces, estudian desde el club, podrían firmar una obra maestra y matar dos pájaros de un tiro: hacerse con Xabi Alonso y uno de sus mejores futbolistas. Una estrategia en la que, como siempre, hay especulación, pero todo es posible…
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