A pesar de ser crítico, Carlo Ancelotti ha vuelto a sacar el mismo once del Allianz Arena. El míster de Reggiolo ha optado por meter a Aurélien Tchouaméni en el medio y Nacho Fernández en la zaga defensiva.
Así pues, el gran ausente es Eduardo Camavinga. El centrocampista francés, que muchos esperaban que fuese titular, tendrá que esperar su oportunidad en el banquillo. Es, sin lugar a duda, la sopresa de la tarde.
Sin embargo, Florentino Pérez entiende la decisión del técnico madridista y se lo ha dejado claro a su gente más cercana: “Es un gran jugador… pero los demás también son muy buenos, solo pueden jugar 11, pero desde el banquillo también se puede ganar, fíjate en Rodrygo hace dos años contra el City lo que hizo", dijo el presidente.
Partido grande
En el Santiago Bernabéu hay ambiente de partido grande. El madridismo tiene ganas de volver a vivir otra gran noche europea y desea llevar a su equipo en volandas hacia otra final de la Champions.
Enfrente estará el Bayern de Múnich. El respeto que hay hacia la entidad germana es máxima y es que es el club más parecido al Real Madrid. Todo puede pasar y las espadas están en todo lo alto.
DEJA TU COMENTARIO