Ese último indultado blanco fue David Beckham y el hecho de que le quitaran una tarjeta amarilla que suponía cumplir un partido de sanción por acumulación de amonestaciones fue utilizado por los árbitros españoles para rebelarse contra el Comité de Competición y contra el Comité de Apelación. Es curioso que los árbitros reaccionaran sólo porque a Beckham le quitaran una tarjeta amarilla y no por las cientos de tarjetas borradas anterior y posteriormente. Ni un solo árbitro dijo nada cuando Piqué, expulsado el pasado mes de diciembre por dar un codazo en el rostro a Guille Franco, del Villarreal, fue indultado. Se da la circunstancia de que, hasta ese momento, el Barcelona era el único equipo de Primera División al que no le habían expulsado ningún jugador en toda la Liga.
La injusticia cometida con Beckham fue tran grande que a una parte del villarato (los comités disciplinarios) no les quedó más remedio que actuar contra otra parte del villarato (los árbitros). Jugaba el Real Madrid en San Mamés y el colegiado asturiano Muñiz Fernández amonestó al centrocampista inglés por supuesta pérdida deliberada de tiempo. La pérdida de tiempo se cuantificó en... ¡siete segundos! Más avanzado el partido, Beckham sacó otra falta, la cual dio origen al gol madridista. En esa segunda ocasión, Beckham tardó diez segundos en sacarla y Muñiz Fernández no dijo ni pío (cualquiera que haya jugado al fútbol sabe que ese tiempo es el que se tarda, más o menos, en colocar el balón y en golpearlo cuando hay una falta).
Beckham cumplía ciclo y no habría podido jugar el fin de semana siguiente, contra el Sevilla, en un partido transcendente, pues la victoria suponía, para ambos equipos, un paso de gigante en la lucha por la conquista de la Liga (ganaron los de Capello, que, en efecto, acabarían haciéndose con el título). Los árbitros protestaron estruendosamente por el perdón a Beckham y amenazaron con adoptar medidas de presión para evitar que se repitiera. Pero ya no han vuelto a protestar cuando se ha indultado a otro jugador ( ¿tal vez porque desde entonces no ha vuelto a haber indultados madridistas?).
LA ÚLTIMA FAENA FUE AYER MISMO
Esta misma semana, tanto Competición como Apelación han desestimado el recurso del Real Madrid para que quedara sin efecto la segunda tarjeta amarilla que Gago vio en Soria. Tampoco se ha retirado la tarjeta que Delgado Ferreiro mostró a Lass por "cortar el balón intencionadamente con la mano". Sin embargo, las imágenes de televisión demuestran que Lass no cortó el balón con la mano, sino que se protegió el rostro con las manos para evitar que impactara en él.
En las últimas temporadas, hasta catorce jugadores han sido inultados por los comites disciplinarios para que pudieran jugar contra el Real Madrid (el último ha sido Palacios, precisamente del Numancia, la pasada semana). En ninguno de estos casos, los árbitros del villarato protestaron por las decisiones de los comités disciplinarios de dejar sin efecto sus tarjetas.
El último caso de esta lista irrisoria lista se ha dado este jueves con Gago. El argentino no fue indultado mientras el barcelonista Alves siguió aprovechando los favores que llegan desde una Federación más culé que nunca. Suma y sigue...
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